Mexicali, BC., La ola cálida que azota a Mexicali y que el martes 29 de agosto rompió su récord histórico con 51.4 grados centígrados, ha dejado hasta ahora 42 personas muertas por golpes de calor, según cifras del sector salud y del Servicio Médico Forense.
Además, día con día, crece la inconformidad de ciudadanos y activistas que se han manifestado en la última semana ante la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y este jueves frente al Congreso local por los constantes apagones que se producen por la sobrecarga, debido al uso excesivo de aires acondicionados y sistemas de enfriamiento, al igual que por la falta de mantenimiento e infraestructura.
De los 42 fallecidos por hipertermia, 39 son hombres, dos mujeres y un niño de cinco años de edad; la mayoría no han sido identificados.
Uno de los casos más recientes fue el de un joven de 16 años, de nombre Carlos, quien trabajaba en una obra en construcción en el ejido Islas Agrarias del Valle de Mexicali. Se desvaneció frente a su padre y murió cuando lo trasladaban para recibir atención médica.
En tanto, un hombre identificado como Jesús, de entre 40 y 45 años, pereció en una calle del fraccionamiento Villas del Rey, primera etapa. Ambos decesos ocurrieron entre las 14 y 15 horas del martes, horario en que por lo regular se alcanza la más alta temperatura.
El calor extremo prevalecerá el resto de la semana en la capital del estado, por lo cual las autoridades recomendaron a la población tomar precauciones.
El registro del 29 de agosto superó el récord del año que se había establecido el 19 de julio, cuando el termómetro alcanzó 51.1 grados centígrados; el martes fue el día de agosto con la más alta temperatura en la historia del municipio desde 1945.
A diferencia de otros años, cuando ha habido temperaturas similares, ahora la humedad genera una sensación de dos grados más.
La gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, y la alcaldesa de Mexicali, Norma Bustamante, instalaron refugios y centros de rehidratación, sobre todo para personas indigentes y migrantes.
Los responsables del programa SOS Migrante de la dirección de seguridad pública local recorren parques, jardines y zonas de alta vulnerabilidad para distribuir agua.
Apagones y recibos locos
El 31 de julio ocurrió un apagón por una tormenta eléctrica en la zona desértica, lo que afectó a medio millón de residentes de Mexicali. El suministro se interrumpió hasta por 10 horas en varias zonas de la ciudad y en el área rural. Dos semanas después, la tarde del 16 de agosto, hubo una serie de apagones, también en sectores de la urbe y en los ejidos.
El 22 de agosto, un grupo de ciudadanos, entre ellos docentes jubilados, amas de casa, madres solteras, trabajadoras del campo y comerciantes protestaron frente a la CFE para exigir la reconexión del servicio, mientras residentes de colonias populares bloquearon vialidades en los cuatro puntos cardinales.
Dijeron estar desesperados, pues tienen en casa a niños y adultos mayores, además de que sus alimentos se pudrieron. También hubo estragos en comercios, en particular de alimentos perecederos.
Manifestaciones en contra de la CFE y el Congreso
Este jueves, residentes de ejidos del oriente y sur del Valle de Mexicali tomaron las oficinas de la CFE en Ciudad Guadalupe Victoria, en la zona agrícola, por las constantes fallas e interrupción del servicio antes y después del paso de la tormenta Hilary.
Los inconformes pusieron cadenas en las puertas; portaban pancartas y lonas con diversas exigencias a las autoridades federales, principalmente que restablezcan el suministro y que revisen los denominados recibos locos
con cobros excesivos.
Advirtieron que si no son atendidas sus demandas tomarán medidas más enérgicas hasta que se encuentre una solución a esta emergencia.
En Mexicali, las condiciones climatológicas obligan a usar aparatos de aire acondicionado, ya que los ventiladores eléctricos son insuficientes. Casas, autobuses, oficinas, aulas y plazas comerciales cuentan con sistemas de refrigeración.
Esto genera un alto consumo de energía eléctrica, lo que dio origen a la lucha histórica de los mexicalenses por tarifas justas. Con el tiempo, este movimiento se tradujo en convenios del gobierno estatal con la CFE para aplicar subsidios en el pago del servicio.
A su vez, la alcaldesa Bustamante pidió a la CFE que revise la infraestructura eléctrica pues, dijo, ha estado abandonada durante años.
La gobernadora Marina del Pilar Ávila hizo una solicitud respetuosa
a la empresa productora del Estado para que restablezca el servicio en su totalidad. En tanto, la senadora Gina Cruz exigió a la CFE retomar el rumbo y cumplir con su mandato constitucional de garantizar el suministro de energía para miles de residentes de Mexicali.
La capital de Baja California se localiza en un valle, a los pies de la sierra de La Rumorosa. Este sistema montañoso prácticamente impide que lleguen corrientes de aire desde el océano Pacífico.
Además, se ubica en los límites con el desierto de Sonora, el cual registra las temperaturas más altas del país durante el año.
Este jueves, integrantes del Frente Cívico Mexicalense se manifestaron arrojando globos con agua frente al Congreso local para reprochar a los diputados que han sido tibios
ante los problemas de los apagones y los recibos locos
Sergio Tamai Quintero, dirigente del organismo, reprochó que el presidente del Legislativo estatal, Manuel Guerrero, no apoya el reclamo de la ciudadanía por un mejor servicio de la CFE.
Hemos buscado una reunión con delegado federal Jesús Alejandro Ruiz Uribe y no nos hacen caso; es parte de su desinterés por el tema. Es omiso ante las demandas de los ciudadanos. Debería renunciar.
Advirtió que los apagones y los cobros excesivos de la CFE pueden provocar una situación fuera de control. La gente ya se organizó. Está indignada por la inoperancia de la empresa
, subrayó.
(Con información de José Manuel Yepiz / La Jornada Baja California)