Ciudad de México. Sin grandes referencias económicas y con la atención de los inversionistas en los datos macroeconómicos que se conocerán a partir del jueves, después de que la semana pasada los banqueros centrales reunidos en Jackson Hole no descartaron nuevas alzas de las tasas de interés, el peso mexicano se deprecia 0.34 por ciento ante la divisa estadunidense, para operar en alrededor de 16.8402 unidades por dólar.
Aunque los inversionistas dan por hecho de que las tasas de interés no subirán más de los niveles actuales, sí se mantendrán en niveles elevados por un periodo largo. Asimismo, en México se dio a conocer el dato de crecimiento económico al segundo trimestre de 2023, el cual avanzó de manera trimestral 0.8 por ciento y en su medición anual 3.6 por ciento. Así, en la primera mitad del año, la actividad económica del país subió 3.7 por ciento.
Mientras tanto, China continúa siendo un foco de preocupación, pues las medidas que se anuncian no transmiten que vaya a apuntalar a la economía asiática.
Entre los datos que se conocerán en las próximas sesiones se encuentran el deflactor de consumo (jueves) y el dato de creación de empleo (viernes) en Estados Unidos y la inflación en la Eurozona (a partir del jueves). También se conocerán los PMIs en China.
Las compras se imponen en la renta variable gracias a una mayor calma en el mercado de renta fija, que ha visto cómo se relajaban los rendimientos de los bonos en las últimas sesiones.
El Nasdaq avanza 1.12 por ciento, mientras que el S&P 500 y el Dow Jones avanzan 0.73 y 0.39 por ciento, respectivamente.
En la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) se reporta una ganancia de 0.14 por ciento, a 53 mil 515 puntos.
En el mercado de deuda, la rentabilidad del bono de Estados Unidos a 10 años se mantiene en el entorno de 4.20 por ciento.
En cuanto al precio del crudo, la cotización del barril Brent, de referencia en Europa, se mantiene en los 84 dólares. Por su parte, el precio del barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, se cambia por 80 dólares.