Nuevo Laredo. En la última semana se detectaron cuatro casos, tres de consumidores de cocaína y uno de mariguana. Fueron suspendidos para continuar trabajando como choferes y se les remitió al Sector Salud para su desintoxicación. Los dos casos restantes fueron detectados de enero a julio.
La Delegación de Transporte Público de la ciudad, realizó un operativo antidoping a los choferes de camiones urbanos y señaló que todo aquel que no cuente con este requisito no podrá operar su unidad.
El delegado de Transporte Público en Nuevo Laredo, Gilberto Martínez, dio a conocer que continúan llevando a cabo diversos operativos en la ciudad para supervisar tanto a las unidades de transporte como a los operadores de ruta, a quienes se les realiza un examen antidopaje.
La primera fase de dichos operativos consistió en llevar a cabo revisiones de forma aleatoria a unidades de transporte para verificar que cuenten con los documentos necesarios tanto el conductor como la unidad, como lo son: licencia de conducir, tarjeta de circulación y los seguros viales vigentes.
Además de la revisión de documentos, los inspectores también practican revisiones mecánicas a las unidades para corroborar que cuenten con lo básico para poder circular de forma segura.
Ahora, para la siguiente fase, la delegación de Transporte Público está llevando a cabo exámenes antidoping a la población de choferes de camiones de ruta en la ciudad, por lo que supervisores se encuentran visitando las diversas empresas concesionarias de transporte para la aplicación de dicho estudio.
Respecto a las sanciones a las que se harán acreedores aquellos conductores que se nieguen a realizarse el examen toxicológico, explicó el funcionario, será inhabilitado a partir de mañana 25 de agosto hasta que acuda a la Delegación de Transporte en la ciudad a cumplir con este requisito.
Por otro lado, Martínez detalló que las pruebas toxicológicas a las que son sometidos los operadores son para detectar sustancias como la mariguana, cocaína, metanfetaminas, anfetaminas y opioides.
En caso de resultar positivo a cualquiera de estas sustancias, se procede a su inhabilitación y se boletín en la Delegación de Transporte Público para evitar que pueda operar camiones de ruta, de maquiladora o taxis, manifestó el delegado.
Cabe aclarar que al conductor se les informa a dónde puede acudir a rehabilitarse, en el caso de querer hacerlo, y al concluir la rehabilitación puede realizarse una vez más el examen para comprobar que está libre de sustancias, con lo que volvería a operar unidades de transporte.