La advertencia de Fitch al sector bancario estadunidense, el mayor recorte de tasas en China desde el 2020 ante sus problemas económicos y las ventas minoristas de Estados Unidos, que superaron expectativas con resiliencia de los consumidores, provocaron caídas en los mercados financieros.
La aversión al riesgo de los inversionistas se mantuvo y llevó al fortalecimiento del dólar. De acuerdo con datos del Banco de México, el peso mexicano se depreció 0.42 por ciento, equivalente a 0.42 por ciento ante la divisa estadunidense, para cerrar en 17.1225 unidades por dólar spot, su segundo retroceso consecutivo. El tipo de cambio operó entre un máximo de 17.1590 unidades y un mínimo de 17.0880 unidades.
El dólar se fortaleció en medio de un consumo fuerte en Estados Unidos y las expectativas de que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos mantendrá una postura monetaria restrictiva, a la espera de más pistas en la reunión de Jackson Hole la próxima semana.
El Banco Popular de China anunció sorpresivamente un recorte de la tasa de interés de sus préstamos bancarios a un año, hasta el 2.5 por ciento, mínimo desde 2020, con el objetivo de reforzar la economía nacional, afectada por la crisis inmobiliaria y la caída del consumo.
Lo anterior después de que la Oficina Nacional de Estadística (ONE) de China dio a conocer que la producción industrial china subió 3.7 por ciento en julio en tasa interanual, frente al crecimiento de 4.4 por ciento observado el mes anterior y por debajo de lo previsto por los analistas. Al mismo tiempo, las ventas minoristas se incrementaron en el séptimo mes del año 2.5 por ciento, seis décimas menos que en junio y su menor alza desde finales de 2022.
Por el contrario, el PIB de Japón del segundo trimestre creció 1.5 por ciento, según los datos preliminares, por encima de las expectativas de los analistas.
Las débiles cifras económicas de China, junto con el recorte de las tasas de interés que puedan no ser lo suficientemente sustanciales como para apuntalar la recuperación económica del país después de la pandemia, incidieron en que los precios del petróleo cayeran más de uno por ciento.
Los futuros de crudo Brent cayeron 1.32 dólares, equivalente a 1.53 por ciento, a 84.89 dólares el barril; mientras que el West Texas Intermediate de Estados Unidos descendió 1.84 por ciento, a 80.99 dólares.
Los recortes de la oferta por parte de Arabia Saudita y Rusia, que forman parte de la OPEP+, grupo integrado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, han contribuido a impulsar el alza de los precios en las últimas siete semanas.
Mientras, Wall Street cerró con caídas superiores a 1.0 por ciento. El S&P 500 cayó 1.16 por ciento, a 4 mil 437.86 puntos; el Nasdaq cedió 1.14 por ciento, a 13 mil 631.05 puntos, y el Dow Jones perdió 1.02 por ciento, a 34 mil 946.39 enteros.
Al interior del mercado estadunidense todos los sectores mostraron pérdidas. El energético cayó 2.44 por ciento; financiero, 1.80 por ciento; servicios básicos, 1.69 por ciento y materiales 1.65 por ciento.
En México, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) avanzó 0.54 por ciento, para alcanzar los 53 mil 568.32 enteros.