Auckland. Brasil y Argentina dijeron adiós anticipadamente en el Mundial femenino sin clasificarse a los octavos de final, tras los malos resultados en sus partidos de este miércoles, en una triste jornada latinoamericana en el torneo.
El resultado más inesperado fue la eliminación de Brasil tras un empate sin goles ante Jamaica con la histórica Marta en la alineación titular, en su despedida de los mundiales.
La fecha puso fin a los grupos F y G del Mundial de Australia y Nueva Zelanda.
En el grupo F, Francia clasificó en primer lugar tras derrotar 6-3 a Panamá y Jamaica ocupó la segunda plaza con su empate ante Brasil.
Suecia se clasificó en el primer lugar del Grupo G tras derrotar 2-0 a Argentina, con Sudáfrica en el segundo lugar tras vencer 3-2 a Italia.
Así las cosas, el domingo próximo Suecia enfrentará a Estados Unidos y Sudáfrica lo hará ante Países Bajos.
En tanto, los rivales de Francia y Jamaica se definirán el jueves con los partidos finales del Grupo G: Corea del Sur-Alemania y Colombia-Marruecos.
Dolorosa despedida
Con Marta como titular, Brasil no logró romper el cerrojo de Jamaica, que se enclaustró atrás y contragolpeó sin mayor empeño, consciente de que el empate le daría la clasificación.
Marta, de 37 años, anunció que este sería su último Mundial, un torneo en el que debutó en 2003.
"Ni en mis peores pesadillas soñé con este Mundial", declaró Marta después del partido, visiblemente dolida.
"Marta acaba por aquí, no hay más Mundial para Marta. Estoy agradecida por la oportunidad de tener un Mundial más y muy contenta con lo que viene pasando con el futbol femenino en el mundo", destacó la emblemática futbolista al concluir su último partido mundialista.
Para Jamaica fue un momento histórico al avanzar a octavos de final sin recibir un solo gol, aunque anotó solo uno, contra la debutante Panamá.
Brasil se acercó al arco repetidamente en disparos de Debinha, Ary Borges, Tamires y la capitana Marta, en el partido disputado en Melbourne ante un nutrido público, que en su mayoría alentó a las brasileñas, de camisa azul.
Las descolgadas de la lateral izquierda Tamires propiciaron las mejores opciones de Brasil en el primer tiempo y calentaron las manos de la arquera Rebecca Spencer.
Brasil llegó al partido con la presión de vencer para seguir con vida en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, luego de perder en su segundo partido, ante Francia, que ganó el grupo.
Jamaica, en tanto, planteó un juego conservador de contención y contragolpe. Tenía la ventaja de poder avanzar a octavos con un empate, merced a su 0-0 contra Francia y su victoria ante Panamá.
"Creo que jugamos demasiado lento para romper la defensa de Jamaica. Ellas hicieron un buen trabajo, pero nosotros no pudimos crear muchas oportunidades" de anotar, declaró la seleccionadora de origen sueco Pia Sundhage en conferencia de prensa.
"No pudimos llegar a la línea de fondo, eso es lo que buscamos cuando tienes ese tipo de defensa", agregó.
Equipo limitado
En tanto, Argentina se despidió de Australia y Nueva Zelanda sin alcanzar su anhelo de ganar un partido en un Mundial.
Su entrenador Germán Portanova reconoció que sus dirigidas tienen que dar mucho más para competir con las potencias futbolísticas, dadas sus limitaciones.
"Si queremos protagonizar con estas selecciones u otras tenemos que dar el doble de esfuerzo, o tres veces más, para competirles de igual a igual durante más minutos", expresó Portanova en conferencia de prensa tras el partido.
"El aspecto físico es una deficiencia que Argentina tiene que corregir. Siempre que se hace una jugada, capaz que no termina en la profundidad que queremos al no tener esa velocidad y esa potencia" que tienen otras selecciones, comentó el entrenador.
Adelantó que parte de esa limitación se va a corregir porque se comenzó a trabajar con jugadoras a edad temprana.
"Nos vamos conformes, las jugadoras lo dieron todo, podemos dormir tranquilos, pero nos vamos tristes porque queríamos ganar, clasificar, teníamos esa ilusión", declaró.