En los últimos cinco años, el Instituto Nacional de Migración (INM) rescató a 160 migrantes de diversas nacionalidades que fueron víctimas del delito de trata, de las cuales 124 eran mujeres y hombres explotados sexualmente, mientras que 36 estaban sometidos a trabajo forzado.
De ellos, 132 regularizaron su estancia en México por razones humanitarias y 28 fueron devueltos a sus países de origen de manera ordenada y asistida por las autoridades migratorias.
Los datos del INM de 2018 a julio de 2023 indican que por nacionalidad 48 provenían de Venezuela, 35 de Honduras, 32 de Guatemala, 23 de Colombia, 10 de El Salvador, cuatro de Nicaragua, tres de Paraguay, dos de Perú, uno de Cuba, uno de Brasil y uno de Argentina.
En el año 2018 el INM atendió a 45 víctimas de trata: 28 mujeres y 17 hombres, de las cuales 14 mujeres eran originarias de Venezuela, siete de Honduras, tres de El Salvador, dos de Paraguay y dos más de Colombia; mientras, seis hombres provenían de El Salvador, tres de Honduras, tres de Guatemala, dos de Nicaragua, dos de Venezuela y uno de Colombia.
En ese año, 22 mujeres fueron asistidas por explotación sexual, seis por explotación laboral, ante lo cual se realizó un retorno asistido y 27 regularizaciones por razones humanitarias. Respecto a los hombres, 15 fueron víctimas de explotación laboral y dos por explotación sexual; se emitieron 17 regularizaciones por razones humanitarias.
En el año 2019 se rescataron 51 víctimas, de las cuales 24 eran mujeres y 27 hombres. Ocho de Colombia, siete de Guatemala, cuatro de Venezuela, cuatro de Honduras y una de Cuba, de las cuales 23 fueron asistidas por explotación sexual y una por explotación laboral. Hubo tres retornos asistidos y 21 regularizaciones por razones humanitarias.
En tanto, 20 hombres provenían de Guatemala, cinco de Honduras, uno de Perú y uno de El Salvador. 26 fueron atendidos por explotación sexual y uno por explotación laboral; se dieron 26 regularizaciones por razones humanitarias y un retorno asistido.
Para el año 2020, fueron rescatadas 31 víctimas: 20 mujeres y 11 hombres. Once mujeres eran de nacionalidad venezolana, cuatro colombianas, tres hondureñas, una paraguaya y una brasileña; 19 fueron atendidas por explotación sexual y una por explotación laboral. Se efectuaron 14 regularizaciones por razones humanitarias y seis retornos asistidos.
Ocho hombres eran originarios de Honduras, dos de Venezuela y uno de Colombia; tres fueron atendidos por explotación sexual y ocho por explotación laboral. Se efectuaron ocho retornos asistidos y tres regularizaciones por razones humanitarias.
En el año 2021, se registraron 15 víctimas: 10 mujeres y 5 hombres. Ocho mujeres provenientes de Venezuela y dos de Honduras; nueve por explotación sexual y una por explotación laboral. Hubo nueve regularizaciones por razones humanitarias y un retorno asistido.
Tres hombres originarios de Venezuela y dos de Honduras; cuatro por explotación sexual y uno explotación laboral. Se emitieron cinco regularizaciones por razones humanitarias.
Mientras, en 2022 se asistió a 15 mujeres: cinco de Colombia, tres de Venezuela, dos de Guatemala, dos de Nicaragua, una de Argentina, una de Honduras y una de Perú; 13 por explotación sexual y dos por explotación laboral. Se expidieron siete regularizaciones por razones humanitarias y ocho retornos asistidos.
Y en lo que va del año 2023, se han atendido tres víctimas mujeres: dos de Colombia y una de Venezuela; las tres por explotación sexual, ante lo cual se procedió a la regularización por razones humanitarias.