El muro de boyas colocado sobre el río Bravo por órdenes del gobernador de Texas, Greg Abbott, vulnera la soberanía de México y ha invadido parte del territorio nacional, por lo que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) envió una segunda nota diplomática al Departamento de Estado de Estados Unidos.
En la mañanera de ayer se informó que México sigue pendiente de ese asunto y como parte de las acciones se instruyó a la sección del país de la Comisión Internacional de Límites de Aguas (que también tiene una parte estadunidense) realizar un recorrido por la zona referida (entre Piedras Negras y Eagle Pass), tras lo que encontró que de los 305 metros de boyas, 230 están en aguas nacionales y sólo 75 del lado texano.
Además, se constató que debido a esas medidas decretadas unilateralmente
por el gobernador texano –quien busca la candidatura presidencial del Partido Republicano– se están construyendo terraplenes que provocan obstrucción y desviación del flujo del río, y se identificaron contenedores metálicos de carga dentro de la zona de inundación y una malla tipo concertina con púas sobre el bordo para evitar el paso.
Ante ello, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador dirigió un nuevo llama-do diplomático a la administra-ción de su homólogo estadunidense, Joe Biden, para reiterar sus inconformidades.
Al participar por primera ocasión en una mañanera, la nueva titular de la SRE, Alicia Bárcena, indicó que ese muro flotante incumple el Tratado de Aguas Internacionales suscrito por ambas naciones y propicia una serie de violaciones de derechos humanos de los migrantes.
Algo muy importante es que estamos hablando de 305 metros (de boyas), no de los 3 mil 500 kilómetros (de frontera común); es un espacio pequeño, pero el principio es lo que nosotros queremos destacar es que de estos 305, pues hay 230 que están más bien del lado nuestro. Entonces, hemos enviado ya dos notas diplomáticas muy claras diciendo que se está violando el Tratado de 1944 y el de 1970
, subrayó la canciller.
Destacó la relevancia que el presidente Biden haya atendido los llamados del gobierno de López Obrador frente a esta situación para presentar una demanda contra Texas a través del Departamento de Justicia.
Hay una decisión del gobierno federal (estadunidense) de apoyar a México en relación a esta acción (de Abbott), que es bastante unilateral
, refirió la funcionaria.