El ingreso corriente promedio trimestral por hogar en México se incrementó a 63 mil 695 pesos en 2022, cantidad que superó en 11 por ciento al registrado en 2020, el año que el país –como todo el mundo– fue golpeado por la pandemia de covid- 19 y experimentó una de sus mayores contracciones económicas en ocho décadas. Comparado con 2018, cuando se inició la presente administración, el repunte fue de 4.6 por ciento y prácticamente se ubica en el mismo nivel que en 2016.
En años recientes, la brecha entre quienes más tienen y los hogares de menores recursos se ha acortado, pero prevalecen claras desigualdades cuando de ingreso se trata, las cuales están marcadas por el género, el grupo étnico, la educación o la entidad de residencia. Así lo reveló la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2022, la cual elabora cada dos años el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La principal fuente de ingreso en los hogares mexicanos fue el trabajo. En 2022 representó 65.7 por ciento de lo que percibieron los hogares; siguieron las transferencias –como remesas, programas gubernamentales y pensiones–, con 17.2 por ciento. Entre ambas fuentes de ingreso representaron 83 de cada 100 pesos que entraron a los hogares mexicanos.
En 2022, la décima parte de los hogares más ricos del país tuvo un ingreso que multiplicó por 15 al de la décima parte de hogares más pobres, expuso la ENIGH22. Esa disparidad fue, sin embargo, menor a la que se observó en 2018, cuando el ingreso de los hogares más ricos multiplicaba por 18 al de los más pobres; o de 2016, cuando la relación fue de 21 a uno.
El desempeño fue diferente entre deciles. De 2018 a 2022, los ingresos aumentaron casi 20 por ciento para los hogares de menores percepciones, mientras para los hogares más ricos se contrajeron 2.2 por ciento.
En 2022, los hogares del decil I (los más pobres) obtienen 2.1 por ciento del ingreso corriente total del país, mientras los del decil X (los más ricos) concentran 31.5 por ciento.
La ENIGH22 mostró que el ingreso de las mujeres en México fue 35 por ciento menor al de los hombres; es decir, por cada 100 pesos recibidos por los hombres, las mujeres sólo obtuvieron 65. El ingreso promedio trimestral monetario de los hombres fue de 29 mil 285 pesos y el de las mujeres de 19 mil 81 pesos, una brecha de 10 mil 204 pesos.
La encuesta reveló que los ingresos de quienes tienen una mayor educación en México se desplomaron en los últimos seis años. Los ingresos de personas con posgrado completo o incompleto ascendieron a 89 mil 986 pesos trimestrales en 2022, mientras los de aquellos con primaria completa reportaron entradas en promedio de 13 mil 514 pesos; en el primer caso cayeron 34.16 por ciento respecto a 2016; en tanto, para los segundos el aumento fue de 34.42 por ciento en el periodo de referencia.
En 2022, las personas que se consideran indígenas tienen un ingreso promedio trimestral monetario de 18 mil 428 pesos, 24.5 por ciento menos que el promedio nacional. En el caso de las personas que son hablantes de lengua indígena, el ingreso promedio fue de 13 mil 708 pesos, 43.9 por ciento menos que el promedio nacional.
En qué gastamos
La ENIGH22 mostró que el gasto promedio trimestral de los hogares en 2022 fue de 39 mil 965 pesos, 17.2 por ciento más en comparación con 2020 (34 mil 108 pesos), pero respecto a 2018, subió 2.1 por ciento.
El rubro más representativo del gasto es el de alimentos, bebidas y tabaco, que concentra 37.7 por ciento de las erogaciones de los hogares. En los pasados dos años el gasto en este renglón aumentó 16 por ciento; el segundo es el de transporte y comunicaciones, con 19.3 por ciento, y el tercero educación y esparcimiento, con 9.8 por ciento. En conjunto, estos tres concentran 70 por ciento de los gastos de los hogares.
En particular el gasto de los hogares en salud mostró un crecimiento, en un periodo que coincide con el de la pandemia. La ENIGH22 refleja que en 2022, los hogares destinaron a este rubro mil 345 pesos trimestrales, que representaron 3.4 por ciento del gasto total. Sin embargo, esa cantidad tuvo un crecimiento de 31 por ciento entre 2018 y 2022, aunque una reducción de 6.8 por ciento de 2020 al año pasado.
El perfil del gasto de la población cambio con la pandemia, ya que los hogares mexicanos gastaron más en comida, principalmente los de deciles I y II, y salud (30.9 por ciento en 2022 respecto a 2018) y mucho menos en educación (una contracción de 17.3 por ciento en el periodo de referencia).
El gasto monetario corriente promedio trimestral de los hogares en áreas urbanas fue 1.6 veces el de las rurales.
Un hogar urbano destinó, en promedio, 4 mil 410 pesos trimestrales al cuidado de la vivienda, en tanto que un hogar rural, mil 727 pesos. En el rubro de cuidados de la salud, un hogar urbano ocupó, al trimestre, mil 390 pesos; uno rural, en promedio, mil 195 pesos.
Dentro del rubro de alimentos y bebidas consumidos en los hogares, el mayor gasto corriente monetario promedio al trimestre se hizo en carnes, con 2 mil 801 pesos. Por su parte, el gasto en cereales fue de 2 mil 79 pesos y el gasto en otros alimentos diversos fue de mil 641 pesos. En verduras fue de mil 345 pesos.
Los tres primeros lugares de gasto corriente monetario promedio trimestral en los hogares correspondieron a alimentos fuera del hogar, con 2 mil 957 pesos; educación, con 2 mil 804 pesos y carnes, con 2 mil 801 pesos.