Guadalajara, Jal., Con extrema precaución y descartando antes la presencia de artefactos explosivos, autoridades estatales retomaron los trabajos para localizar cadáveres en fosas clandestinas descubiertas en un área cercana al poblado de San Lucas Evangelista, en Tlajomulco.
De acuerdo con colectivos de búsqueda, en este terreno de alrededor de 100 metros cuadrados habían sido hallados 51 cuerpos hasta el 12 de julio, cuando se suspendieron los rastreos después de que el día anterior presuntos miembros de la delincuencia organizada tendieron una trampa en el centro de Tlajomulco a un convoy policial, al colocar a su paso siete minas terrestres, cuyo estallido provocó la muerte de seis personas y lesiones a 14.
El lugar donde se reanudaron las labores de búsqueda está en la margen sur de la laguna de Cajititlán y a un costado del Cerro Viejo; fue encontrado por familiares de personas desaparecidas a principios de mes.
Antes de comenzar las labores, agentes estatales utilizaron binomios caninos para tratar de detectar artefactos explosivos. Una vez que se descartó ese riesgo continuaron las excavaciones, con apoyo de maquinaria pesada.
El área quedó sin vigilancia policiaca tras la decisión del gobernador Enrique Alfaro, de Movimiento Ciudadano, de no realizar rastreos a partir de llamadas anónimas, según denunció el colectivo Madres Buscadoras de Jalisco.
Integrantes de dicha agrupación se quejaron de que, además de no cuidar el sitio durante varios días, ahora que se reactivaron los trabajos les impiden participar como observadores, lo cual es su derecho.
Desde el miércoles se encuentran en las inmediaciones media docena de unidades de la policía estatal, de la fiscalía del estado y del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses
Hasta ahora la Fiscalía del Estado se ha negado a proporcionar información acerca del número de cuerpos encontrados en esta serie de fosas; sólo ha dicho que difundirá los datos una vez que concluyan las labores de búsqueda.
El 12 de julio, horas después del atentado en Tlajomulco, el gobernador Enrique Alfaro aseguró que una ciudadana que participa en uno de los colectivos de madres buscadoras recibió una denuncia anónima sobre un punto donde habría restos humanos y lo dio a conocer a las autoridades.
Como siempre lo hemos hecho, atendimos el reporte y acudimos a revisar. Lo que sucedió es que esta llamada buscaba la presencia de nuestras policías para agredirlas con estos artefactos explosivos
, declaró el mandatario, quien añadió que por tal motivo se suspenderían las búsquedas a partir de reportes de personas no identificadas.
El 13 de julio, en su conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó sobre el atentado: Todo indica que no es cierto, que fue una mentira, que no fueron las madres las que llamaron
.
El 14 de julio, enterado de que el domingo 16 habría una marcha para exigir que las búsquedas no fueran suspendidas, Alfaro aclaró que sólo se refería a aquellas que se sustentaran en denuncias anónimas. El enemigo no es el gobierno, (sino) el crimen organizado
, recalcó.
Además cambió su versión y dijo: Lo que tenemos que entender es que lo que sucedió el pasado martes (11 de julio) se inició con una serie de llamadas durante tres días para insistir en la necesidad de que nuestras corporaciones fueran a ver una supuesta fosa clandestina en Tlajomulco
.
Según prometió el gobernador, esta semana se instalaría una mesa de trabajo de colectivos y autoridades estatales para revisar los protocolos de búsqueda, pero hasta ayer eso no había ocurrido.