Guadalajara, Jal. Con extrema precaución y descartando antes la presencia de artefactos explosivos, autoridades estatales continúan este jueves con los trabajos que iniciaron ayer para localizar más cadáveres en fosas clandestinas en Tlajomulco, en inmediaciones del poblado San Lucas Evangelista, donde hasta el miércoles 12 de julio, se suspendieron las labores de búsqueda y se habían contabilizado por lo menos 51 cuerpos según datos de los colectivos de buscadores.
El lugar, ubicado al sur de la laguna de Cajititlán, y a un costado del Cerro Viejo, fue encontrado por grupos de búsqueda de familiares de desaparecidos y las autoridades retomaron las exhumaciones que luego suspendieron tras el estallido de siete minas terrestres en el centro de Tlajomulco, ocurrido la noche del 11 de julio, en una “trampa” planeada por la delincuencia organizada a un convoy policial que causó la muerte de seis personas y lesiones en 14 más.
Antes de reiniciar la búsqueda en San Lucas, se tuvo el apoyo de binomios caninos para tratar de localizar artefactos explosivos y evitar un nuevo atentado. Fue hasta que se descartó ese eventual riesgo que se reactivó la búsqueda con maquinaria pesada.
El lugar había quedado sin vigilancia policial desde el viernes pasado, tras la decisión del gobernador emecista, Enrique Alfaro, de no realizar búsquedas a partir de llamadas anónimas.
Al menos media docena de unidades de la policía estatal; fiscalía y del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, participan desde ayer en la búsqueda.
La fiscalía estatal se ha negado a proporcionar información oficial acerca del número de cuerpos encontrados en esa serie de fosas y sólo ha dicho que proporcionará los datos una vez que concluyan las labores de búsqueda.