Ciudad de México. Está demostrado que los intermediarios financieros no bancarios (IFNB) son buenos pagadores para la banca de desarrollo, hecho que permite a estas instituciones de crédito otorgar préstamos a las pequeñas y medianas empresas (pymes) del país, un sector históricamente rezagado con los bancos comerciales y que además es responsable de emplear al 60 por ciento de la población, dio a conocer Nacional Financiera (Nafin).
Por lo anterior, Nafin dio a conocer este jueves un nuevo modelo llamado crédito estructurado, que consiste en otorgar crédito a las IFNB para que estas les presten a las pymes, y se estima que por cada línea de financiamiento que la banca de desarrollo le otorga a los intermediarios, mil firmas privadas se vean beneficiadas.
“Este esquema va enfocado a que con esta estructura les prestemos dinero a los IFNB y ellos le presten a las pymes para así atender a todas las empresas. Tenemos la capacidad de atender la demanda que se de, el monto máximo que prestamos son 700 millones de pesos y eso beneficia a mil pymes”, dijo Jorge de la Madrid Corona, director de intermediarios financieros y microcréditos de Nafin.
El modelo de crédito estructurado fue presentado junto con la Asociación Mexicana de Sociedades Financieras de Arrendamiento, Crédito y Factoraje (Amsofac), quienes aseguraron que este nuevo esquema de financiamientos solamente está enfocado en impulsar el crecimiento económico del país.
El directivo de Nafin precisó que Nafin, en su mayoría, otorga una mayor cantidad de líneas de crédito a Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofomes), sin embargo, el desarrollo de estos nuevos productos tiene como fin que más intermediarios no bancarios se acerquen a expandir su forma de adquirir capital.
El crédito estructurado solamente podrá ser otorgado si los no bancarios demuestran que el capital irá destinado a una pyme, es decir, las IFNB no pueden otorgar estos recursos a temas relacionados con consumo o vivienda, y los pagos a Nafin se pueden otorgar en un plazo máximo de seis años.
Jorge de la Madrid Corona expuso que, si bien, en los últimos años el sector financiero no bancario ha tenido dificultades, son temas específicos y que no contaminan a todo el ecosistema, por ello la apuesta por otorgarles préstamos.
“Vemos intermediarios fuertes y sólidos, nosotros, como banca de desarrollo, debemos poner el ejemplo a la banca privada, y demostrar que los IFNB es un sector fuerte que se debe seguir apoyando, lo que buscamos es dar más canales de financiamiento a las pymes y atender diferentes segmentos y poblaciones, porque estas empresas son el motor de la economía del país”, puntualizó el directivo.