Madrid. El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk, alertó este martes que las quemas de ejemplares del libro sagrado del islam, el Corán, pueden polarizar sociedades y agravar las tensiones existentes en las mismas.
“Las personas deben actuar con respeto por los demás. Sólo así será posible un diálogo sostenido. Solo así podremos tener una conducta entre los seres humanos que nos permita enfrentar, juntos, los desafíos que tenemos por delante”, declaró Turk durante una sesión urgente del Consejo de DH celebrada por los incidentes derivados de la quema de ejemplares del Corán.
Turk llamó a respetar cualquier creencia en “beneficio de la diversidad para todas las sociedades” y ha pedido a los países “prohibir la apología del odio”, “la incitación a la violencia” y “la discriminación”.
“Para mí, está claro que el discurso y los actos incendiarios contra los musulmanes, islamofobia, antisemitismo; y las acciones y los discursos dirigidos a los cristianos, o grupos minoritarios como los ahmadis, los bahá’ís o los yazidíes, son manifestaciones de total falta de respeto. Son ofensivos, irresponsables y equivocados”, aseguró.
Además, afirmó que los “actos de agresión o destrucción de símbolos o iconos religiosos parecen haber sido fabricados para expresar desprecio e inflamar la ira, dividir a las personas y convertir las diferencias en odio y violencia”.
Turk recordó que, mientras que una simbología puede no significar nada para alguien, puede representar “un sistema de valores” para millones de personas.
Por otra parte, recalcó que el uso de un lenguaje peyorativo o intolerante contra una persona o grupo de personas en función de su sexo, creencia, raza o cualquier otro factor “inherente a la persona o su identidad” sigue siendo una forma de incitación al odio.
“Todo ese discurso de odio es similar, ya que se deriva de la noción básica de que algunas personas merecen menos respeto como seres humanos”, comunicó Turk
Asimismo, recordó que los seres humanos nos comunicamos a través de símbolos y que todas las personas deben respetarlos, independientemente de las creencias individuales.
Respecto a las redes sociales, el Alto Comisionado advirtió sobre su peligro si se usan para “propagar odio”, y ha pedido a la sociedad a combatir este tipo de discursos con “diálogo, educación, sensibilización, compromiso interreligioso e intercomunitario”. “Necesitamos promover la armonía interreligiosa y el respeto mutuo, en interés de todas las comunidades”, concluyó.