Las duras críticas que la presidenta municipal de Tepic, Geraldine Ponce Méndez ha recibido por amamantar a su hija de 2 meses de edad en sesión de cabildo, no ha frenado que ella siga asistiendo a diferentes eventos, entrevistas, entrega de obras y actividades cotidianas propias de su encargo, acompañada de María, como se llama la menor.

 

Ponce lleva a su hija en un fular, lo que mantiene a la pequeña pegada al pecho de su madre o bien, en reuniones prolongadas la pone en sus brazos, incluso, en fotografías difundidas por su equipo de comunicación, se aprecia un biberón en la mesa, mezclado entre botellas de agua, tazas de café y refrescos.

 

La alcaldesa, de 29 años de edad y de extracción morenista, ha ignorado las críticas ciudadanas de quienes señalan que la "niña" es una suertuda porque puede permanecer con su madre en horario laboral, mientras que una mujer con un horario y un trabajo considerado regular, debe pagar una guardería donde dejar a sus hijos, ya que en la oficina, no les admiten que los lleven o bien, recurrir a algún familiar para que esté al pendiente del infante.

 

Hace algunas semanas, la presidenta municipal de Tepic fue duramente criticada en redes sociales por amamantar a su hija en una sesión de cabildo, a lo que ella respondió que, "amamantar en algo natural" y agregó, "la maternidad no debe ni puede estar peleada con la vocación de ninguna mujer".

 

Por lo pronto, la pequeña María ya ha pasado por reuniones de seguridad, entrega de obra de la avenida Insurgentes, una de la más circulada de Tepic, reuniones vecinales y otras actividades más.