La tibia de un homínido conservada en el Museo Nacional de Kenia, en Nairobi, reveló el posible caso más antiguo de canibalismo; podría haber ocurrido hace más de 1.45 millones de años, según revela un artículo publicado en la revista Scientific Reports.
Hace casi millón y medio de años, un grupo de parientes humanos –que no fueron identificados pero pudieron ser Homo erectus u Homo habilis– dejaron marcas de corte en la espinilla hallada en un sitio en el norte de Kenia, que muestra signos de que el dueño pudo haber sido sacrificado para separar la carne, lo que posiblemente representa el primer caso conocido de canibalismo entre homínidos.
La paleoantropóloga Briana Pobiner, del Museo Nacional de Historia Natural en Washington DC, señaló que la gente tiene hambre y se come a los muertos para alimentarse
.
Si una especie se comió a otra, esto técnicamente no habría sido canibalismo, sino un caso de antropofagia, o comer carne de homínido, sostiene Pobiner, autora principal de la investigación. De todos modos, agregó, estos homínidos pueden haberse parecido un poco, y los carniceros probablemente no escogieron a quién comían.
En 2017, la paleontóloga viajó a Kenia para examinar docenas de huesos de homínidos que se encuentran en los museos nacionales de Kenia en Nairobi. Buscaba marcas de mordeduras de animales en los huesos, lo que indicaría que los primeros homínidos fueron devorados por depredadores africanos como hienas o gatos monteses.
Sin embargo, no encontró marcas de mordeduras. En cambio, halló lo que parecían signos de corte en un hueso de la espinilla de un homínido, que fue descubierto en 1970 en la región de Turkana, en el noroeste de Kenia, por la famosa paleoantropóloga británica Mary Leakey.
Pobiner había visto esas marcas antes. Precisó: He estudiado cientos de huesos de animales fósiles de los mismos periodo y región que tienen huellas de carnicería. Así que supe de inmediato lo que eran
.
Identificó una serie de modificaciones en la superficie del hueso en el lado medial del eje proximal que parecían compatibles con las marcas de corte de herramientas de piedra. Ante la duda, creó 11 muestras de estas marcas con material de moldeo dental y envió los moldes a Michael Pante, paleoantropólogo de la Universidad Estatal de Colorado y coautor del nuevo estudio, y a Trevor Keevil, estudiante de doctorado en antropología en la Universidad de Purdue y coautor del estudio, sin decir lo que pensaba que eran.
Pante y Keevil escanearon en 3D las misteriosas marcas y las compararon con una base de datos de 898 marcas de dientes, carnicería y pisoteo realizadas en experimentos controlados. Su análisis mostró que al menos nueve de las 11 marcas de corte habían sido hechas con herramientas de piedra en el hueso de 1.45 millones de años. No hay razón para tal carnicería a menos que la carne sea para comer, y Pobiner afirma que parece que los comensales estaban tratando de separar el músculo carnoso de la pantorrilla del hueso. Los están matando de la misma manera que a otros animales
, agrega.
Los expertos atribuyen este caso al canibalismo nutricional, que ocurre con el único propósito de obtener alimentos
y se puede dividir canibalismo incidental, que se enfoca en la supervivencia, o de larga duración, también llamado canibalismo gastronómico o dietético, en el que los humanos son parte de la dieta de otros humanos.
Con información de la Redacción