La construcción de viviendas unifamiliares en Estados Unidos se disparó en mayo a un máximo en más de un año y los permisos para futuras edificaciones también subieron, lo que sugiere que el mercado de la vivienda puede estar dando un giro tras haber sido golpeado por las alzas de tasas de interés de la Reserva Federal (Fed).
Las viviendas unifamiliares iniciadas, que representan la mayor parte de la construcción de hogares, aumentaron 21.7 por ciento, a una tasa anual desestacionalizada de un millón 631 mil unidades el mes pasado, desde los 1.34 millones de abril revisados a la baja, informó el martes el Departamento de Comercio.
La tasa de mayo fue la más alta desde abril de 2022, que había sido la mayor desde 2006.
El mercado de la vivienda ha recibido el mayor golpe de la campaña de endurecimiento de la política monetaria más rápida de la Fed desde la década de 1980, pero los últimos datos han sugerido que lo peor puede haber pasado.
Una encuesta realizada el lunes mostró que el índice del mercado de la vivienda de la Asociación Nacional de Constructores de Viviendas/Wells Fargo subió en junio por encima de la marca intermedia de 50 por primera vez desde julio de 2022, ya que la escasez de viviendas de segunda mano favoreció la construcción de nuevas casas. El índice ha repuntado 77 por ciento desde diciembre.
La tasa promedio de la popular hipoteca fija a 30 años ha bajado un poco desde el máximo tocado en noviembre por encima de 7 por ciento. La última semana promedió 6.77 por ciento, según datos de la Asociación de Banqueros Hipotecarios. Pero el endurecimiento de las condiciones crediticias podría dificultar el acceso de los constructores a la financiación de nuevos proyectos.
Tras subir las tasas en 5 puntos porcentuales desde marzo de 2022, la Fed se tomó este mes un respiro para evaluar los efectos de sus medidas adoptadas hasta ahora, aunque es probable que las alzas del costo del crédito se reanuden el mes que viene con una inflación aún demasiado alta.