La misión de paz que impulsan siete países de África continuó este sábado su intento de mediación al entrevistarse en San Petersburgo con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, un día después de hacerlo en Kiev con el mandatario de Ucrania, Volodymir Zelensky.
La delegación africana está integrada por el presidente de Sudáfrica, Ciryl Ramaphosa; el de Senegal, Macky Sall; el de Zambia, Hakainde Hichilema; el de las Comoras, Azali Assoumani, también actual presidente de la Unión Africana, así como por el primer ministro de Egipto, Mustafa Madbuli, el director del gabinete presidencial de la República del Congo, Florent Ntsiba y el enviado especial de Uganda, Ruhakana Rugunda.
En nombre de sus colegas, Ramaphosa reiteró en San Petersburgo los diez principios que, a juicio de los países africanos, deben poner fin a la guerra, dados a conocer por primera vez el viernes en la capital ucrania. Resumidos, éstos son:
La guerra tiene que terminar mediante negociaciones y el conflicto debe resolverse por la vía diplomática.
-Las negociaciones tienen que comenzar cuanto antes.
-Ambas partes deben tomar medidas para revertir le escalada de sus ataques.
-Debe asegurarse la soberanía de los Estados y los pueblos con base en la Carta de Naciones Unidas.
-Es necesario otorgar garantías de seguridad a todos los países.
-Tienen que permitirse los suministros de cereales y fertilizantes de ambos países.
-Hay que asegurar que las víctimas de la guerra reciban ayuda humanitaria.
-Debe solucionarse el intercambio de prisioneros de guerra y el retorno de los niños ucranios desde los territorios bajo control de Rusia.
-Se necesita crear condiciones para la reconstrucción de Ucrania después de la guerra.
-Y las partes del conflicto deben mantener una relación más estrecha con los países de África.
El anfitrión, tras destacar el “enfoque equilibrado” de los países africanos y declaró que Rusia “está abierta al diálogo con quienes deseen la paz basada en los principios de justicia y de respeto de los intereses legítimos de las partes”.
Putin endosó a Ucrania la culpa por el fracaso de las negociaciones que hubo en Estambul en marzo de 2022, las cuales, según él, concluyeron de modo abrupto cuando Rusia como “gesto de buena voluntad” retiró las tropas que había mandado para asaltar Kiev.
“Ya había un borrador de acuerdo. Se titula así: Tratado de Neutralidad Permanente y Garantías de Seguridad para Ucrania. Se trata de las garantías que mencionó el presidente de la República de Sudáfrica. Dieciocho artículos", señaló el titular del Kremlin y mostró el documento rubricado por la parte ucrania.
Añadió que tiene varios anexos, que “se refieren a las fuerzas armadas, también a otras cosas. Todo está detallado, hasta las unidades de equipo de combate y el personal”.
El mandatario ruso se preguntó: “¿Qué garantías hay de que no se vuelva a repetir? Nosotros no suspendimos las negociaciones, fueron ellos. Y no quieren negociar con Rusia. Incluso (el presidente) Zelensky prohibió mediante un decreto negociar con nosotros”.
Para Putin, “todos los problemas de Ucrania comenzaron tras el golpe de Estado, inconstitucional, armado y sangriento, en 2014, un golpe apoyado por patrocinadores occidentales. (…) Y esta es la fuente de poder de los actuales gobernantes de Kiev: un golpe de Estado”.
Contó a sus interlocutores africanos que “el régimen de Kiev hizo repetidos intentos de resolver el problema del Donbás por la vía armada y esencialmente inició las hostilidades en 2014, utilizando aviones, tanques y artillería contra estos civiles. El régimen de Kiev desencadenó esta guerra en 2014, y nosotros teníamos derecho, en virtud del artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas, a ayudarles invocando la cláusula de defensa”.