Buenos Aires. Argentina registró en mayo un incremento de los precios al consumidor de 7.8 por ciento, que lleva la inflación anual a 114.2 por ciento, informó este miércoles el instituto oficial de estadísticas Indec.
En lo que va del año, la inflación es de 42.2 por ciento.
El índice del quinto mes mostró una leve moderación, de 0.6 puntos porcentuales respecto de abril, cuando el costo de vida aumentó 8.4 por ciento, el incremento mensual más importante en tres décadas.
El principal freno lo exhibió el sector clave de alimentos y bebidas no alcohólicas, que subió 5.8 por ciento en mayo, frente a un incremento de 10.1 por ciento registrado en abril.
Durante mayo el rubro que mostró mayores alzas de precios fue el de gastos en alquiler de viviendas y servicios, con un incremento de 11.9 por ciento, restaurantes y hoteles, con 9.3 por ciento, y salud con 9 por ciento.
La inflación es uno de los mayores desafíos para el gobierno del presidente Alberto Fernández y complica al oficialismo de cara a las elecciones presidenciales que tendrán lugar en octubre, para las cuales el mandatario desistió de postularse a un segundo mandato.
“La inflación es un problema muy serio de Argentina. ¿Arrancó conmigo? De ninguna manera. De cualquier manera no se puede vivir con una inflación de cien por ciento”, admitió Fernández este miércoles en una entrevista con estudiantes secundarios difundida por redes sociales.
En un informe sobre expectativas de mercado publicado el viernes pasado por el Banco Central, los principales analistas económicos de Argentina calcularon que la inflación será de 148.9 por ciento en 2023.
Las dificultades de la economía argentina se han visto acentuadas por el impacto de una fuerte sequía sobre el sector agrícola y ganadero, principal fuente de divisas del país.
El Fondo Monetario Internacional, con el cual Argentina está comprometida en un acuerdo crediticio por 44 mil millones de dólares, pronosticó que el país alcanzará en 2023 un crecimiento de 0.2 por ciento de su economía.