El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, expidió el Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares, instrumento que busca establecer procedimientos homologados en todo el país para dirimir las controversias entre particulares.
El decreto fue publicado en el Diario Oficial de la Federación, por lo que también se abroga el Código Federal de Procedimientos Civiles y Familiares, para que entre en vigor el nuevo código en forma gradual a nivel federal y local, sin que pueda exceder del 1 de abril de 2027.
El código consta de mil 191 artículos divididos en 10 libros, además de un régimen transitorio compuesto por 20 artículos en donde se considera un lapso de cuatro años para su aplicación a partir de su publicación.
Con este nuevo instrumento jurídico se intenta priorizar la oralidad y "un acceso a la justicia pronta, completa, imparcial y expedita, para garantizar a los operadores jurídicos el ejercicio de sus funciones, habilidades y destrezas, acorde con los derechos humanos, postulados y principios contenidos en la Constitución".
Asimismo, integra un modelo en el que se busca impulsar el uso de las tecnologías de la información en los procesos judiciales, con el objetivo de unificar los criterios y bases normativas, a fin de materializar el ideal histórico de justicia y equidad en la solución de conflictos.
El decreto señala que este código busca la oralidad, la justicia digital, el respeto a los derechos humanos y la protección de aquellas personas que se encuentren en alguna situación de vulnerabilidad.