Acapulco, Gro. En asamblea del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la Presa La Parota (Cecop), en el poblado de Cacahuatepec, la mañana del domingo, comuneros denunciaron la extracción desmedida de grava y arena del río Papagayo, lo cual aseguran que ha ocasionado un grave problema de disminución en los niveles del cuerpo de agua, entre otras afectaciones, como la extinción de peces y camarones.
Advirtieron que no obstante ganar un litigio agrario en febrero de 2017, mediante el cual quedó demostrado que el propietario de una de las principales gravilleras que opera en el río Papagayo, Humberto Marín Molina, no es comunero, la extracción de material pétreo se ha incrementado en años recientes.
En recorrido efectuado la mañana del domingo, en un tramo del río Papagayo de longitud aproximada de 3 mil metros, entre las comunidades de Parotillas y La Concepción, se observaron dos máquinas retroexcavadoras en el centro del río, en el cual se han formado bancos de arena, e incluso fue improvisado un camino para que la maquinaria pueda introducirse a extraer arena y gravilla.
De hecho, al concluir la asamblea, algunos de los comuneros atravesaron caminando el río, debido a su bajo nivel, y cuyo fondo ya es de lodo, y no de gravilla.
A un costado del cuerpo de agua se pueden observar unos 90 mil metros cúbicos de gravilla, en un terreno perteneciente a la empresa gravillera.
El vocero del Cecop, Marco Antonio Suástegui Muñoz, expresó que “el gobierno debería investigar quiénes están llevándose el material del río, quien debe cuidar el río es la Federación”, y recalcó que las tierras son comunales y de uso agrícola.
Manifestó que “la ley dice que nadie puede venir a explotar el río Papagayo si no hay un permiso otorgado por la Federación a través de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), las tierras no son para almacenar material pétreo, son de uso agrícola. Deben tener permiso de los comuneros, a través de una asamblea”, y advirtió que en los márgenes del río operan unas 12 tolvas, lo que ha dañado el manto freático en algunos sectores.
Suástegui Muñoz adelantó que el Cecop viajará a la ciudad de México a denunciar la sobreexplotación y extinción del río Papagayo, y alertar que las huertas se están secando y las palmas se están acabando, además de iniciar una demanda de carácter ambiental, para lo cual acudirán al Centro Mexicano de Derecho Ambiental.
Subrayó que “están matando al río Papagayo, mientras estábamos cuidando que no hicieran la presa, descuidamos al río”, y puntualizó que de 100 órdenes de aprehensión que tienen miembros del Cecop, 80 fueron propiciadas por las empresas gravilleras, lo que habla de la magnitud del problema.
El comunero Mario Estrada Bailón señaló que “el río está herido, lo están ordeñando, los de afuera están jodiendo a los criollos, a los verdaderos dueños”.
Otro de los portavoces del Cecop, Rodolfo Chávez Galindo, expresó que primeramente el Cecop se organizó para luchar contra la presa, y ahora se va a organizar para detener a las gravilleras y defender al río Papagayo.
El pasado 30 de mayo, la presidenta municipal de Acapulco, Abelina López Rodríguez, admitió que ya existen afectaciones en el río Papagayo debido a la extracción de material pétreo por parte de empresas gravilleras, sin embargo, advirtió que es un problema que debe resolver la Conagua.
Explicó que debido a la extracción de gravilla se ha visto afectada la captación de agua para su posterior distribución al puerto de Acapulco, pues se han formado bancos de arena alrededor de los pozos de captación.