Ciudad de México. Con oraciones, cantos y ofrendas de velas por cada menor que perdió la vida en el incendio del 2009, familias de las víctimas realizaron este domingo la tradicional vigilia en las afueras de las ruinas de la guardería ABC ubicada en la colonia Y Griega al Sur de Hermosillo, Sonora.
Tras 14 años de la tragedia infantil más grave en la historia de México, padres, familiares y vecinos del inmueble se reunieron en la intersección De los Ferrocarrileros y Mecánicos, en memoria de las 24 niñas y 25 niños que fallecieron en el siniestro y los más de cien qué resultaron con lesiones y afectaciones en su organismo.
Ahí los deudos se reunieron en una ceremonia presidida por el sacerdote Claudio Murrieta, quien expuso que estas velaciones nocturnas son un emotivo momento para honrar la vida de los pequeños que partieron, recordarlos de una manera positiva y con amor, pero también para conmemorar la digna lucha que enfrentan las familias y los sobrevivientes con las autoridades para exigir que se haga justicia.
"Hoy nos reunimos para hacer esta vigilia, conmemorando nuestra más antigua tradición en la que creemos que los seres queridos nos siguen acompañando y resignificamos su presencia de muchas maneras y siempre esta presencia la asociamos con la luz en nuestra vida", expuso frente al encendido de 49 velas.
Los presentes llevaron las velas hacia las cruces colocadas al exterior de la estancia infantil, ahí cada una con el rostro tierno de cada menor y su nombre. Al tiempo que se entonaban las estrofas: “Nos duele amigos hasta los huesos y se endurecen nuestras entrañas. Por la injusticia, la cobardía, nos va invadiendo la hipocresía” de la canción de León Gieco, que cada año se corea esta ofrenda, ahí también se colocaron ofrendas de “Las Copechi”, el grupo de mujeres bordadoras que han acompañado a los deudos desde el día de la tragedia a la fecha.