Guadalajara, Jal. La desaparición de cinco jóvenes que laboraban en un call center de Jardines Vallarta, en Zapopan, generó una manifestación de familiares y colectivos civiles que fue de la glorieta La Minerva hacia la residencia oficial del gobernador Enrique Alfaro -Casa Jalisco-, donde se toparon con un inmueble rodeado de vallas metálicas que les hizo ratificar que este sábado regresarán en una nueva marcha.
“Nos faltan cinco”, gritaban los manifestantes, quienes también criticaron que “al gobernador sólo le importa el balón” luego de sus constantes apariciones en redes sociales junto al gobernador de Nuevo León y compañero del partido Movimiento Ciudadano, Samuel García.
Entre el 20 y 22 de mayo fueron denunciadas las desapariciones de Itzel Abigail Valladolid Hernández, Carlos David Valladolid Hernández, Arturo Robles Corona, Carlos Benjamín García Cuevas y Jesús Alfredo Salazar Ventura.
Los familiares y allegados de los desaparecidos señalan que tenían, en promedio, tres meses de laborar en el call center, el cual según las primeras investigaciones era un lugar para vender y cobrar tiempos compartidos tanto a nacionales como extranjeros.
"La información preliminar que tenemos es que los chicos trabajaban en esa especie de oficina, la que estamos revisando. Y estamos trabajando también con el municipio y con dependencias del estado para tratar de identificar la actividad de la empresa, la temporalidad y obviamente cuál es la línea que trabajaba", explicó.
Afirmó que existen varios posibles móviles acerca de las desapariciones, entre ellos el de la cobranza de tiempos compartidos y que dio inicio un “operativo robusto” por las zonas que han identificado podrían ser buscados con mayor oportunidad de localizarlos, contando con el apoyo de imágenes de cámaras de vigilancia.