Ante el ultimatum que el gobierno federal puso en la compra-venta de la marca Mexicana de Aviación, se corre el riesgo de que los jubilados y extrabajadores de esta aerolínea se queden "fritos" porque perderán la oportunidad de recibir una parte proporcional de esta negociación, advirtieron los líderes de diversas agrupaciones sindicales de aviación.
"Hoy estamos en una disyuntiva. Si permitimos que vuelva a volar o no la primera aerolínea de México, solo por una minoría que no lo permite y la invitación a estos compañeros es tomar una decisión dolorosa, pero necesaria porque se sacrifica parte de lo que son nuestros derechos", Marco Calva Pimentel, secretario del interior del Sindicato Nacional de Trabajadores de Transportes, Transformación, Aviación, Servicios y Similares.
En conferencia de prensa, la secretaria general de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación de México (ASSA), Ada Salazar; el presidente de la Asociación de Jubilados Trabajadores y extrabajadores de la Aviación Mexicana (AJTEAM), Fausto Guerrero, y el presidente de la delegación de Mexicana de Aviación en la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores de México (ASPA), Eduardo Barrera, exhortaron a los 229 trabajadores que se oponen a la compra-venta de la marca de la extinta aerolínea, de lo contrario perderán la oportunidad de que 6 mil 500 jubilados y extrabajadores reciban una parte de esa venta.
La Secretaría del Trabajo y Previsión Social del gobierno federal les informó que el 5 de junio vence el plazo para que puedan concretar la venta de la marca y bienes embargados de la aerolínea que dejó de operar hace más de 12 años.
"Si las partes no cedemos vamos a llevar a Mexicana a la ruina al igual que sus bienes. Cinco organizaciones llegamos a un acuerdo y estamos tratando de aprovechar lo que nos da este gobierno y que no hizo el gobierno de Enrique Peña Nieto ni Calderón", aseveró el presidente de la AJTEAM, Fausto Guerrero.
En ese mismo sentido se pronunciaron los representantes de ASPA y la Coalición de Empleados de Confianza, al señalar que no se trata de encontrar vencedores ni vencidos, sino de llegar a acuerdos porque la vía legal ha sido muy larga y de seguir así no hay fecha para obtener lo que cada ex empleado debería recibir.
Señalaron que en esta batalla jurídica 37 jubilados ya fallecieron sin llevarse nada, por lo que este es un buen momento para aprovechar la oferta del gobierno federal, de lo contrario se quedarán sin nada.