Ciudad de México. En la plaza Giordano Bruno, en la colonia Juárez de la Ciudad de México, permanecen migrantes, sobre todo haitianos, que decidieron no ser trasladados por el Instituto Nacional de Migración (INM) a otros estados del sur, como lo hicieron anoche con sus compatriotas. Varios de ellos señalaron que se negaron a irse porque tienen cita con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), y otros por temor a ser llevados de nuevo a Chiapas o ser deportados vía aérea.

Máxime y su esposa, haitianos, expresaron que tienen una semana en este espacio público, aunque por las noches se trasladan al albergue de la alcaldía Cuauhtémoc a dormir. Señalaron que ayer, cuando llegó personal del INM decidieron no irse porque no había información clara sobre a dónde los llevarían y porque tienen una cita en la Comar para el 29 de mayo.

“Nosotros ya tenemos el permiso de tránsito por 45 días, lo que queremos es apresurar la cita de la Comar para tener un carnet para poder trabajar porque aquí ya no nos alcanza para comer. Además nosotros no queremos ir a Chiapas porque de allá venimos”, dijo Máxime.

Nadele, otra mujer haitiana, mencionó que aunque ayer el personal de migración “nos trató bien”, había temor porque “venía la policía y nos decían que teníamos que desalojar porque hay quejas de los vecinos”.

Indicó que ella lo que quiere es trabajar. “Ya no pienso en ir a Estados Unidos, quiero quedarme aquí a trabajar porque no tengo dinero, pero sin el carnet no me dan empleo”. Mencionó que tiene conocimiento de que algunos de lo migrantes que fueron trasladados ayer llegaron a Huixtla, Chiapas, donde les dieron un permiso.

Personal que labora en la iglesia Sagrado Corazón de Jesús, que se ubica frente a la Plaza Giordano Bruno, expuso que desde hace tres días ha albergado en el templo a algunos de los migrantes, esto ante las condiciones que se encuentran, sin dónde dormir y por las fuertes lluvias que se han registrado.

Mencionó que ayer que llegaron agentes del INM se generó la confusión y el temor porque no sabían qué sucedía, pero una vez que les explicaron algunos migrantes decidieron irse y otros pernoctaron ahí. Señaló que según los reportes que recibieron, algunos de los que se fueron, llegaron a Oaxaca.

Antoine manifestó que entre sus compatriotas haitianos la principal preocupación es ser deportados, “que se los lleven en avión, porque no queremos regresar a nuestro país, ahí no podemos vivir”.