Fráncfort. Casi un tercio de las personas con empleo en Alemania afirman que no les alcanza el dinero para llegar a fin de mes debido al aumento de los precios.
De unos mil empleados encuestados por el instituto de estudios de opinión YouGov, 21 por ciento dijo que “más bien no” le alcanza el sueldo para cubrir el costo de vida, mientras que 8.5 por ciento declaró que el dinero “no le alcanza para nada”. El ejercicio fue realizado por encargo del banco Postbank, que pertenece al Deutsche Bank.
Los hogares encuestados con un ingreso mensual neto inferior a dos mil 500 euros apenas llegan a fin de mes. El 43 por ciento de las personas pertenecientes a este grupo dijeron que con su sueldo no pueden pagar el actual costo de vida.
El aumento de precios sostenido desde hace meses que se registra en Alemania es una carga para los consumidores. Reduce su poder de compra, lo que significa que actualmente es posible comprar menos con un euro.
En abril, la inflación en Alemania se ralentizó por segundo mes consecutivo, pero con 7.2 por ciento, la tasa siguió siendo comparativamente alta.
Los consumidores tuvieron que pagar 17.2 por ciento más por los alimentos que un año antes. Los precios de la energía subieron 6.8 por ciento en un año.
El gobierno federal intenta hacer más asequibles el gas natural, la electricidad y la calefacción urbana aplicando frenos de precios retroactivos al 1 de enero.
En tanto, el Banco Central Europeo (BCE) intenta frenar la elevada inflación con una serie de subidas de los tipos de interés desde julio de 2022. Unos tipos de interés más altos encarecen los préstamos. Esto puede frenar la demanda y contrarrestar las altas tasas de inflación. A mediano plazo, el BCE aspira a la estabilidad de precios en la eurozona con una tasa de inflación del dos por ciento.
“La inflación no es sólo un problema económico, sino también social. Los que tienen los ingresos más bajos son los más afectados por el aumento de los precios”, reconoció el estratega jefe de inversiones para clientes privados y corporativos de Deutsche Bank, Ulrich Stephan.
“En este sentido, también puede tener sentido subir los salarios, especialmente para estos grupos. Sin embargo, hay que tener cuidado con que los salarios más altos no alimenten aún más la demanda general”, apuntó.