Washington. El Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo este jueves que un impago de la deuda de Estados Unidos provocado por la imposibilidad de elevar el techo de deuda tendría “repercusiones muy graves” para la economía del país y la mundial, incluido un probable aumento de los costos de endeudamiento.
La portavoz del FMI, Julie Kozack, afirmó también en una rueda de prensa que las autoridades estadunidenses deberían permanecer vigilantes ante las nuevas vulnerabilidades de su sector bancario, incluidos los bancos regionales, que podrían surgir en el ajuste a un entorno de tasas de interés mucho más elevadas.
Kozack dijo que el FMI no puede cuantificar de inmediato el impacto que tendría un impago sobre el crecimiento mundial. En abril pronosticó un incremento de 2.8 por ciento del producto interno bruto (PIB) mundial para 2023, pero señaló que mayores turbulencias en los mercados financieros, marcadas por una fuerte caída de los precios de los activos y fuertes recortes de los préstamos bancarios, podrían hacer retroceder el crecimiento de la producción hasta uno por ciento.
No obstante, señaló que la subida de las tasas podría ser una de las consecuencias de un impago estadunidense y de una inestabilidad más generalizada en la economía mundial.
“Nos gustaría evitar esas graves repercusiones”, señaló. “Y por esa razón, volvemos a hacer un llamado a todas las partes para que se reúnan, lleguen a un consenso y resuelvan el asunto lo antes posible”.
Las conversaciones detalladas sobre el aumento del techo de deuda del gobierno estadunidense, de 31.4 billones de dólares, comenzaron el miércoles con los republicanos que insisten en recortar el gasto, un día después que el presidente demócrata Joe Biden se reunió con el principal congresista republicano para tratar el asunto por primera vez en tres meses. La reunión entre el presidente Joe Biden y los principales legisladores, que estaba prevista para este viernes, fue aplazada para la próxima semana, dijo un portavoz de la Casa Blanca.
La secretaria del Tesoro estadunidense, Janet Yellen, ha advertido de que podría producirse un impago de Estados Unidos a partir del 1 de junio si el Congreso no eleva el tope de endeudamiento.