Zacatecas, Zac. Los integrantes de la organización no gubernamental: Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA), cuestionaron este martes la recién aprobada reforma a la Ley Minera del país, pues ésta, consideraron a través de un pronunciamiento escrito, hecho llegar a medios de comunicación de todo el país, mantiene la prevalencia del modelo extractivista neoliberal.
“En la REMA no apostamos por ‘nivelar’ jurídicamente las condiciones entre los implicados (pueblos y empresas) para hacer así de la minería un negocio ‘mejor administrado’ o ‘más justo’, sino que apostamos por fortalecer la autodeterminación de las comunidades, para que tengan la información sobre los impactos a corto y largo plazo que conlleva esta actividad, y ejerzan sus derechos colectivos para evitar convertirse en una zona de sacrificio más de este modelo de falso desarrollo”.
Los integrantes de esta organización, plantearon que reconocen que el modelo extractivo, se basa en la existencia de condiciones de tremenda desigualdad -mismas que profundiza-, y que a partir de estas condiciones se hace un gran negocio de la destrucción masiva, al externalizar los daños y costos socioambientales de su acción.
Por estas razones, desde la REMA “no apostamos a ‘mejorar’ la actividad minera sino a prohibir su entrada dentro de nuestros territorios. No apostamos por ‘nivelar’, jurídicamente, las condiciones entre los implicados (pueblos y empresas) para hacer así de la minería un negocio ‘mejor administrado’ o ‘más justo’”.
Contrario a eso, señalan, “apostamos por fortalecer la autodeterminación de las comunidades para que tengan la información sobre los impactos a corto y largo plazo que conlleva esta actividad, y ejerzan sus derechos colectivos para evitar convertirse en una zona de sacrificio más de este modelo de falso desarrollo”.
En este contexto, indica la REMA, “creemos que cualquier reforma a la ley minera que no plantea la prohibición y cierre planificado de esta actividad nociva en el país, justificada y acompañada por la reparación de daños por décadas y siglos de acumulación de desechos tóxicos en cientos de puntos del país, es una simulación que solamente va a seguir legitimando y dando pie a la expansión del modelo extractivo”.
Además sostiene la ONG, “sabíamos que tratar de modificar la ley minera, tal como se hizo el viernes 28 de abril por el pleno del Senado y que aún no ha sido publicado, no resuelve el grave problema de la devastación en los territorios por el modelo extractivo minero, que aceleró la reforma al Artículo 27 constitucional en 1992 y la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos y Canadá (ahora conocido como el T-MEC), y que el gobierno de la 4T no ha querido tocar”.
“Era de esperar que las cámaras –de diputados y senadores-, terminaran cediendo a las presiones de las empresas mineras nacionales, extranjeras y a las embajadas de países como Canadá, por medio de la Cámara Minera de México, imponiendo sus cínicas condiciones”.
Además plantea la REMA, “tampoco sorprende que las empresas mineras norteamericanas ahora amenazan al país con docenas de posibles amparos de inconstitucionalidad o demandas bajo los términos de los Tratados de Libre Comercio y de protección de inversiones, dando lugar al pronunciamiento del presidente Andrés Manuel López Obrador, en el sentido de que las reformas a la ley minera ‘no van a afectar’, a las más de 23 mil concesiones mineras ya otorgadas en el país”.
Finalmente, entre otros cuestionamientos, la REMA considera que, “si bien coincidimos en que la antigua ley minera estaba diseñada para el saqueo, también sabemos que los cambios (recientes) a la ley, no resuelven los problemas a los que nos enfrentamos de manera cotidiana en los territorios”.
“La antigua ley minera en ninguno de sus artículos estipulaba que las empresas mineras tenían derechos sobre los pueblos y territorios donde operan, ni les daba derecho de engañar, criminalizar, contaminar, enfermar, desplazar y acabar con la vida; todo esto lo hacen porque es su naturaleza”.
