Ciudad de México. La posibilidad de hacerse de buen dinerito sin gran esfuerzo, aunque sí con algún riesgo, lleva a la gente a meterse al Metro a robar cable, pues por un kilito se pueden llevar entre 120 a 150 pesos en los negocios de compra de desperdicios industriales, según la calidad del material, la zona y cómo sepan negociar, comentaron algunos trabajadores.

Los entrevistados, quienes solicitaron el anonimato, señalaron que nunca preguntan de dónde viene, pero sabemos que es chueco, pero la chamba es la chamba, aunque lo que más llegan a traer son tapas de coladeras, cuyo precio por kilo está en 5 pesos.

El Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) informó que el peso de una rejilla está en función del material y sus dimensiones. Las más comunes son las de fierro fundido o hierro dúctil, con peso de 80 a 110 kilogramos.

Mientras, las de polietileno de alta densidad pesan entre 50 y 65 y las de policoncreto de 80 a 95 kilogramos, las cuales no son robadas, porque no se compran en los negocios de fierro viejo o chatarra, donde no existen operativos, señalaron trabajadores.

La mayoría recibe PET, latas, cartón, papel periódico y fierro, pero, aclararon, nunca nos llevan más de 10 kilos en una sola ocasión, equivalente al peso de un metro de cable. Si está brilloso y más grueso, se compra en 150 pesos, y si ya está quemado, en 120 a lo mucho.

Comentaron que traen las alcantarillas en trozos para su venta. No es mucho lo que se llevan, pues por un cuarto o mitad se dan 120 a 250 pesos. También nosotros podemos meter entre todo el fierro que compramos sin problema.

De acuerdo con datos del Sacmex, en las 16 alcaldías hay 470 mil 413 pozos de visita, rejillas de piso y coladeras pluviales. En esta administración ha tenido que sustituir 7 mil 50 por falta de tapa o porque se encontraban en mal estado.

En la Plataforma del Sistema Unificado de Atención Ciudadana no se específica la causa o motivo de los accesorios hidráulicos faltantes, aunque la mayor sustitución se ha presentado en la zona norte, comprendida por las alcaldías Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza.

El costo estimado para la sustitución de accesorios, ya sea rejilla o brocal de pozo de visita, traslado y colocación, así como el personal y vehículo utilizado es de 9 mil 614.48 pesos, lo que significaría una erogación de 67 millones 782 mil 84 pesos.

Sólo del 15 de marzo de 2022 al 15 de marzo pasado, el Sacmex presentó 12 denuncias por el robo de accesorios hidráulicos, como son tapas de coladera y/o pozos de visitas y/o rejillas, sin llegar a ningún acuerdo reparatorio con quienes los sustrajeron.

El pasado 29 de marzo, el Congreso de la Ciudad de México aprobó una reforma al Código Penal para sancionar con penas de cárcel de tres a siete años y multas hasta de 103 mil pesos a quienes roben, vendan o compren alcantarillas y tapas de registro, así como mobiliario de las redes de agua potable y drenaje, señalización vial, mobiliario de gimnasio al aire libre o parques o cualquier mobiliario urbano.