Ciudad de México. Dado que todos los reflectores se dirigieron a First Republic Bank y su nuevo propietario, JP Morgan, los inversionistas mantuvieron en la mente la reunión de política monetaria de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos del 2 y 3 de mayo, por lo que cerraron con balances mixtos.
En una perspectiva dividida sobre el actuar de la Reserva Federal, pues las probabilidades de un aumento de 0.25 puntos porcentuales de la tasa de referencia conviven con la estimación de que podría empezar a hacer una pausa en su dosis monetaria, con el fin de combatir la inflación.
El cierre por festivo en México y Europa, con motivo del Día del Trabajo, otorgó más margen de actuación. Finalmente JPMorgan fue la entidad que se ha quedado con el control de First Republic Bank frente a otros candidatos como PNC y Citizens.
Wall Street, que abrió este lunes con un signo prácticamente plano, después de conocerse las novedades sobre First Republic Bank, y sin referencia alguna de los mercados cerrados por festivo, cerró negativo.
El Nasdaq cayó 0.11 por ciento, para cerrar en 12 mil 212.60 puntos; mientras que el S&P 500 retrocedió 0.04 por ciento, a 4 mil 167.87 unidades. En tanto, el Dow Jones cayó 0.14 por ciento, a 34 mil 51.70 unidades.
Los reguladores confiscaron First Republic este lunes por la mañana y vendieron la mayoría de las operaciones del banco a JP Morgan en una de las mayores quiebras bancarias desde la crisis financiera de 2008. El CEO de JP Morgan Chase, Jamie Dimon, dijo que la incautación de First Republic pone fin a un período de pánico en el sistema bancario.
"Esta parte de la crisis ha terminado", comentó a los analistas en una conferencia telefónica. Las acciones de JP Morgan subieron más del 2.0 por ciento el lunes.
El dólar se apreció 0.48 por ciento, a 101.890 unidades. Con el cierre de mercados mexicanos, el peso mexicano se apreció a 17.9366 unidades por dólar en mercados internacionales.
La cotización del barril de Brent, de referencia en Europa, bajó del nivel de los 80 dólares, hasta los 79.35 dólares, con un descenso de 1.23 por ciento; mientras que el barril tipo West Texas, de referencia en Estados Unidos, se repliega hasta los 75.71 dólares, con una caída de 1.41 por ciento. La subida de tasas prevista por la Fed para el próximo miércoles y la contracción en los últimos datos de actividad manufacturera de China (49.2 puntos en el PMI de marzo) añaden nuevas dudas sobre la evolución de la demanda de crudo.