Tel Aviv. Decenas de miles de israelíes protestaron el sábado por la reforma judicial propuesta, la 17ma manifestación semanal contra la coalición gobernante del primer ministro Benjamin Netanyahu.

Las protestas han sido constantes prácticamente desde que inició el año y los organizadores planean continuarlas, pese a que Netanyahu demoró los cambios el mes pasado. Los líderes de las protestas masivas quieren que las propuestas se eliminen por completo.

“Apenas estamos iniciando”, decía una pancarta que manifestantes sostenían en la principal protesta en Tel Aviv, el centro económico de Israel. Se reportaron manifestaciones más pequeñas en varias partes del país.

El líder socialista y presidente de España, Pedro Sánchez, expresó apoyo a las protestas antigubernamentales israelíes en un mensaje transmitido en una pantalla grande en Tel Aviv.

Los manifestantes argumentan que los cambios propuestos ponen en riesgo los valores democráticos de Israel, afectan al sistema de revisiones y balances y concentran la autoridad en manos de Netanyahu y sus aliados extremistas.

También afirman que el primer ministro tiene un conflicto de intereses al intentar reformar el sistema legal del país ya que está siendo enjuiciado.

Dichos cambios resultarían en la debilitación de la Corte Suprema, otorgándole al Parlamento, controlado por los aliados de Netanyahu, la autoridad para anular sus fallos y limitar su capacidad de revisar leyes.

La protesta ganó apoyo de la fuerza de reserva élite del ejército, empresas y grandes sectores de la comunidad israelí. Pero el jueves, decenas de miles de israelíes derechistas que apoyan los cambios legales salieron a las calles de Jerusalén para mostrar su respaldo a la propuesta.