Ciudad de México. Aunque ha habido avances importantes en materia de equidad entre hombres y mujeres, las empresas que ellas dirigen o crean todavía son “menospreciadas” socialmente, por considerar que se trata de actividades “adicionales” al cuidado de su familia, pero no la fundamental de la persona responsable de dicho emprendimiento.
Así lo indicó la investigadora universitaria Gina Zabludovsky, quien lamentó que las sociedades todavía siguen impulsando y reconociendo más los proyectos encabezados por hombres que por mujeres, por lo que es necesario romper con los estereotipos de género que consideran a algunas profesiones como “masculinas” o “femeninas”.
Al participar en el foro “Mujeres universitarias: visiones desde la innovación, la creatividad y el ingenio”, la socióloga e integrante de la Junta de Gobierno de la UNAM lamentó que “la invisibilidad y el no reconocimiento de las aportaciones de las mujeres es la constante” en diversas actividades, que van desde el arte hasta la economía y la docencia.
En el ámbito de lo empresarial, dijo, las expectativas sociales de los roles de las mujeres son muy distintas a las de los hombres, pues mientras se piensa que en el caso de ellos sus emprendimientos deben ser de mayor escala o tener más reconocimiento, en el de ellas se considera que son sólo una “actividad adicional”, pero no la más importante de su vida.
“Muchas veces se menosprecia lo que hacen, incluso para obtener créditos, además de que se espera que se dediquen más a ciertas áreas, como la de servicios, mientras que en sectores como la tecnología o la construcción sigue habiendo una discriminación muy fuerte”, denunció.
Luego de recalcar que el entorno social lleva a muchas mujeres empresarias a reconocer menos sus propias contribuciones, Zabludovsky consideró que la UNAM debe promover mucho más la participación de las jóvenes en carreras como ingeniería o matemáticas, al mismo tiempo que invite a los hombres a estudiar licenciaturas como enfermería o pedagogía, para romper la idea de que hay campos de conocimiento exclusivos para cada sexo.
Por su parte, la física y astrónoma Julieta Fierro coincidió en la necesidad de que haya más mujeres estudiando disciplinas de ciencia y tecnología, y consideró que la Universidad “podría hacer más de lo que hace” para impulsar a las estudiantes a avanzar en sus carreras académicas, para que lleguen a niveles de posgrado.