Ciudad de México. Sólo Lamborghini, en su locura por las altas prestaciones y desempeño extremo, pudo infundir vida a un superdeportivo como este: el Huracán Sterrato, una fusión única entre la las prestaciones y sensación de manejo de un purasangre, con el desempeño y diversión de estar al volante de un auto de rally que lleva al máximo la adrenalina y la diversión en cada aceleración.
Aunque en parte se basa en el Huracán EVO, los responsables de ingeniería y diseño de la casa italiana lo han dotado de una serie de elementos que le imprimen un estilo único; en comparación con el EVO, el Sterrato lleva salpicaderas más anchas, la carrocería que supera la altura en 44 milímetros con respecto al piso, cuenta con recorridos de suspensiones más generosos, tomas de refrigeración superiores y unos vistosos faros al final del cofre que le dan un aspecto más agresivo, entre otros elementos.
Incorpora un motor V10 atmosférico de 5.2L que eroga 610 Hp y 560 Nm de torque, los cuales entrega a 6,500 rpm, para catapultar los 1,470 kilogramos que pesa la unidad para que acelere de 0 a 100 km/h en solamente 4 segundos y alcance una velocidad máxima de 260 km/h.
Lo que hace diferente al Huracán Sterrato es que es un un superdeportivo que puede entregar un desempeño y respuesta únicos sobre el asfalto, pero que también lo hace en terracería con una respuesta inigualable que le permite circular sin problema alguno como si se tratase de un auto de rally.
La caja de cambios es automática secuencial de doble embrague con 7 velocidades con tracción en las cuatro ruedas con diferencial autoblocante mecánico trasero. Este ejemplar tiene su producción limitada a 1 mil 063 unidades para todo el mundo.