Las colectivas estudiantiles que sostenían la toma de la Universidad Autónoma Metropolitana, unidad Azcapotzalco (UAM-A) desde hace más de un mes, entregaron este jueves las instalaciones de dicho campus a las autoridades del mismo, ante una serie de amenazas realizadas por supuestos grupos porriles, pero aclararon que este acto no implica el fin del paro académico.
Como adelantó La Jornada, desde la noche del miércoles las estudiantes que participaban en la ocupación acordaron devolver la unidad a los funcionarios de la UAM-A, para resguardar su integridad, luego de que se registraran amenazas de un supuesto ataque de porros para recuperar el control de la escuela.
Este jueves, los activistas se reunieron con el rector de la unidad, Oscar Lozano Carrillo, a quien le hicieron entrega de las instalaciones de manera formal, luego de leer un documento con las condiciones para realizar dicho acto, y con la presencia de diversas académicas que conforman una comisión de seguimiento de los acuerdos entre ambas partes.
Poco después de las 12 PM, las participantes en la toma dieron lectura a un pronunciamiento en el cual confirmaron que “ayer, alrededor de las 19 horas, tras una serie de acontecimientos sospechosos dentro y fuera de las instalaciones, comenzaron a correr rumores de que grupos porriles asistirían a tomar la unidad, buscando meter su propia agenda política”.
Los rumores se esparcieron tan rápido, afirmaron, que se acordó devolver el control de la escuela a las autoridades de la misma, y “para las 20:45 horas ya se habían entregado las llaves de la Puerta 4 a un representante de la autoridad”.
Tras subrayar que el flujo de rumores e información sobre este tema “tensó la situación al punto de hacerla insostenible”, las jóvenes recalcaron que “la entrega de las instalaciones no implica el levantamiento del paro ni el retorno a actividades académicas, administrativas ni estudiantiles”.
En ese tono, manifestaron su solidaridad con las alumnas de las otras cuatro unidades de la UAM y esperaron que la entrega del campus Azcapotzalco no signifique “el aumento de la presión hacia los movimientos de las demás unidades para que entreguen las instalaciones”.
Previamente, mediante un comunicado en su página de Facebook, las colectivas feministas explicaron que ayer miércoles 12 de abril realizaron una asamblea interna donde acordaron establecer una fecha de entrega de las instalaciones para los próximos días, en función de la respuesta de los directivos a su pliego petitorio.
Sin embargo, tomaron la decisión de adelantar dicho acto luego de recibir diversas amenazas, entre ellas un posible atentado cometido por “grupos porriles”.
Tomando en cuenta esa “amenaza latente, y con la intención de salvaguardar la seguridad” de los participantes en la ocupación, “se tomó la decisión de entregar instalaciones a las 20:45 horas de ayer para su resguardo. Asimismo, se acordó que se entregarían oficialmente los acuerdos (con las autoridades) y las instalaciones a las 12 horas del día 13 de abril”.
Las colectivas manifestaron su temor al anunciar esta decisión, pues “existen organizaciones cuyos intereses, demandas y agendas políticas son ajenas a un movimiento feminista y no tienen injerencia en las negociaciones que tuvimos en materia de perspectiva de género y derechos humanos”, por lo que las desconocieron.
Asimismo, añadieron que sus peticiones “están siendo atendidas por las autoridades de la unidad” y seguirán avanzando en los acuerdos previamente alcanzados con ellas “para poder asegurar una unidad libre de violencia de género”.
Las activistas subrayaron que le pedirán al rector de la unidad, Oscar Lozano Carrillo, que reitere su compromiso de que la entrega de instalaciones no implica el fin del paro académico en la UAM-A, y que esta decisión “no sea una medida de presión para entorpecer o invisibilizar las negociaciones de las unidades hermanas de Cuajimalpa, Xochimilco, Lerma e Iztapalapa, ya que la solidaridad y sororidad en el movimiento por parte de Azcapotzalco, continúa”.
Denuncias de supuesto “ataque porril”
Unas horas antes de que se anunciara la entrega de la unidad Azcapotzalco, alumnos de ese colegio denunciaron que la noche del miércoles un grupo de supuestos “porros” había ingresado a las instalaciones y había sacado mediante amenazas a los jóvenes que se encontraban en el lugar, aunque fuentes oficiales cercanas al tema desmintieron lo anterior y adelantaron que se trataba de una entrega pacífica acordada por la propia asamblea.
Personas vinculadas a la ocupación le aseguraron a La Jornada que ayer un conjunto de personas --calificados como “porros” -- entró al mencionado campus y obligó a unos 30 activistas a retirarse del lugar en medio de amenazas, pero sin hacer uso de violencia física ni dejar heridos.
Unos minutos después del retiro de los paristas, diversos usuarios de Facebook –entre ellos “Memo Moreno Situam” y “Gic Azcapo”-- publicaron mensajes en los cuales notificaron que “personal de base y de confianza está dentro de las instalaciones” de la UAM-A, y que “la entrega oficial será mañana (hoy) al mediodía”.
De igual forma, el usuario UAMemes indicó: “Al parecer el día de mañana (hoy) quedará liberada la UAM Azcapotzalco, esto no quiere decir que ya tengamos clases pero por lo menos esa unidad de la UAM ya estará abierta, poco a poco se irán abriendo las demás unidades y en unos días se hará la junta del colegio académico para analizar las opciones del reajuste al calendario escolar”.
Rector de la UAM-A pide “paciencia” a la comunidad
Por su parte, Lozano Carrillo destacó que en la UAM-A tuvo lugar un “diálogo abierto y transparente”, al tiempo que condenó las amenazas dirigidas en contra de los estudiantes que sostenían el paro, lo cual “enrareció” las pláticas que se habían realizado y apresuró la decisión de devolver la unidad a los funcionarios.
El rector enfatizó que los directivos de todas las unidades están dialogando con las asambleas estudiantiles para atender sus demandas y reconoció que “este movimiento estudiantil es legítimo y va a permitir que la Universidad en su conjunto dé un paso cualitativo en este problema estructural tan grave como la violencia de género y la discriminación”.
Subrayó que el Colegio Académico de la UAM tendrá que sesionar pronto para hacer diversas modificaciones “en el marco de sus competencias” y llamó a la comunidad de la unidad Azcapotzalco a ser “pacientes” en cuanto al regreso a clases.
“Busquemos la conciliación y el entendimiento. La Universidad está haciendo todo para que pronto volvamos a abrir y estamos en una ruta conveniente de diálogo”, estimó Carrillo.
La entrega fue pactada: fuentes oficiales
Consultadas sobre el tema, personas cercanas a la UAM confirmaron que las instalaciones de la UAM-A sí habían sido entregadas ayer miércoles en la noche, pero desmintieron que se haya tratado de una acción cometida por “porros”, sino que fue una entrega acordada por la propia asamblea estudiantil.
“Las paristas entregaron la unidad Azcapotzalco en acuerdo con las autoridades. Dijeron que se entrega la unidad, pero va a continuar la discusión y las mesas de diálogo”, indicaron.
Las fuentes abordadas por este diario recalcaron que “no tiene ninguna validez” la versión del “ataque porril”, pues “son las mismas estudiantes en paro las que están haciendo la entrega, aunque quien empezó a anunciar esto fueron gente del sindicato”.
Asimismo, aseguraron que la entrega de la unidad fue pacífica, por lo que no hubo heridos ni detenidos, y “las instalaciones están muy cuidadas; hay pintas mínimas en el piso, pero la unidad la cuidaron muy bien, no hay mayores destrozos”.