Ciudad de México. Poco después de las 6 de la tarde, durante hora y media, varias decenas de estudiantes de la UNAM retiraron el bloqueo de ambos sentidos de la Avenida Insurgentes, a la altura del edificio de la Comisión Nacional de Agua, en protesta por la suspensión de recursos de la Beca Elisa Acuña.

Después de las 4:20 P.M., los jóvenes inconformes detuvieron la circulación en la mencionada vialidad, en medio de consignas como “¿En dónde están, en dónde están, las pinches becas que nos iban a pagar?”. Asimismo mostraron pancartas en las que se leían frases como “Mi beca no se toca”, “Sin becas, estudiar es un privilegio”, y “Más becas, menos Guardia Nacional”.

Los manifestantes marcharon desde la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales y caminaron por diversas escuelas, como la de Veterinaria, Medicina, Química, Economía, Derecho y Filosofía, para convocar a otros compañeros a que se sumaran a la protesta

Unos minutos antes del inicio de la caminata, la UNAM lanzó un comunicado en el cual aseguró que podrá cubrir los recursos que contemplaba la mencionada beca para no afectar a sus alumnos y alumnas.

A continuación el contenido integro de dicho comunicado.

“En relación al Programa de Becas Elisa Acuña, de Apoyo a la Manutención UNAM 2023-2, la Universidad Nacional Autónoma de México informa lo siguiente:

1.- La Universidad, con recursos propios, de la Fundación UNAM y de donativos diversos, está en posibilidades de mantener la totalidad de los apoyos considerados en el Programa de Becas Elisa Acuña y de cubrir el monto asignado para cada uno de ellos, no obstante que en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2023 no fueron asignados recursos para dicho Programa.

2.- En el transcurso del mes de abril será publicada la información relativa a estos Apoyos de Manutención UNAM, por lo que se recomienda a nuestro alumnado estar pendiente del Portal del Becario de la Universidad, así como de las redes sociales.

3.- Para la Universidad Nacional es una prioridad mantener los apoyos económicos que benefician a decenas de miles de alumnos y alumnas, sin los cuales sus condiciones de vida y su desempeño en el estudio se verían seriamente mermadas.”

Por su parte, a través de un pronunciamiento, alumnos de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales señalaron a tres directos responsables de la posible afectación de 55 mil estudiantes que se quedarán sin recibir el apoyo. Además, manifiestan que con esta dependencia de la Unam ante la federación se pierde autonomía e independencia.

En primera instancia, señalan a la Cámara de Diputados al no establecer un presupuesto específico designado para los recursos de la Beca Elisa Acuña.

Seguido de la Subsecretaría de Educación Superior del Ejecutivo Federal por haber cancelado el convenio entre el Ejecutivo Federal y la dirección central de la Unam que aseguraba el financiamiento de los apoyos en cincuenta por ciento por cada institución.

Finalmente, señala a la administración central de la UNAM como principal responsable de la crisis que vive la máxima casa de estudios, puesto que al ser la universidad pública que mayor presupuesto recibe, se nota la ineficiencia y uso discrecional de éste al observar los servicios de lujo con los que cuentan las autoridades en comparación con la falta de atención de otros rubros, entre ellos los apoyos económicos sociales, el desgaste de las instalaciones y seguridad interna.