Moscú. Un atentado con bomba segó la vida este domingo de un conocido bloguero pro ruso, Maksim Fomin, conocido por su seudónimo Vladlen Tatarsky con el que firmaba su canal en Telegram y que llegó a tener 560 mil suscriptores.
La policía confirmó que la explosión que mató a Fomin, de 40 años, ocurrió en el café Street Food Bar No. 1, ubicado en el malecón Universitario de la ciudad de San Petersburgo, y dejó un saldo de 25 heridos, 19 de ellos hospitalizados con distintos grados de gravedad.
El establecimiento solía ser, sobre todo los fines de semana, una especie de club de debates del llamado Frente Cibernético Z, que reúne a simpatizantes con blogueros que apoyan la “operación militar especial” de Rusia en Ucrania, y este domingo Fomin, presentado como “corresponsal de guerra” adscrito a las tropas rusas, estaba ofreciendo una charla sobre sus experiencias recientes en los campos de batalla.
Hasta el momento nadie ha reivindicado la autoría del atentado. Denis Pushilin, el gobernante de la autoproclamada República Popular de Donietsk, tras decir que Fomin era “un auténtico patriota del Donbás y de Rusia”, culpó de su muerte al “régimen de Kiev”: “Lo mataron de una manera cobarde. Los terroristas no pueden de otra forma. El régimen de Kiev es un régimen terrorista. Hay que aniquilarlo”.
Mikhaylo Podolyak, en funciones de vocero del gobierno del vecino país eslavo, rechazó de inmediato la acusación y aseguró que Ucrania nada tuvo que ver, atribuyendo el atentado a “la lucha intestina” dentro de Rusia.