Ciudad de México. La defensa de Gilda Margarita Austin y Solís presentará un perito médico para acreditar que la mamá del ex director de Pemex, Emilio Lozoya, enfrenta padecimientos graves que han afectado su condición física y salud mental, como parte de las pruebas con las que pretende que se le permita enfrentar en libertad su proceso penal por lavado de dinero y asociación delictuosa.
La definición de si se modifican las medidas cautelares que enfrenta Gilda Margarita Austin, serán determinadas en una audiencia que iniciará a la una de la tarde por Genaro Alarcón López, juez de control del Centro de Justicia Penal Federal con sede en el Reclusorio Norte.
En la sesión de ayer, los abogados defensores solicitaron el cambio de medida cautelar impuesta a su representada, para lo cual argumentaron que está afectada “gravemente en su salud física y mental”.
En la diligencia, la defensa, que encabezan Miguel Ontiveros Alonso y Alejandro Rojas Pruneda, señaló que, de acuerdo con dos dictámenes médicos, Gilda Margarita, de 75 años de edad, padece trastorno de estrés postraumático, depresión moderada y sigue un tratamiento por anorexia, ya que ha perdido ocho kilos.
Sin embargo, para el Ministerio Público Federal la señora debe continuar en arraigo domiciliario, ya que no padece enfermedades terminales o que le impidan cumplir con la actual medida cautelar.
La fiscalía consideró que si el juez le permite seguir su proceso en libertad, existe el riesgo de que se evada de la justicia.