Londres. China representará alrededor de 40 por ciento del aumento de la demanda mundial de petróleo este año, a medida que su economía sale de las estrictas medidas de confinamiento, pero el mayor uso no hará que los precios vuelvan a los niveles de 2022, dijo el jueves la consultora Wood Mackenzie.
En un escenario base, la economía de China crecerá en 5.5 por ciento este año después de que levantara su estrategia de contención del COVID, sostuvo WoodMac en un informe. Esto equivaldría a 1 millón de barriles diarios (bpd) de un aumento de 2.6 millones de bpd en la demanda mundial de petróleo este año.
Un escenario de alto crecimiento, en el que el producto interno bruto (PIB) de China aumente 7 por ciento, añadiría otros 400 mil bpd de demanda, según el informe.
Sin embargo, el precio medio del Brent se mantendría este año por debajo del promedio de 99 dólares por barril registrado en 2022, ya que “los mercados se han adaptado al caos provocado por la guerra de Rusia frente a Ucrania”.
Salvo que se produzca una recesión significativa, WoodMac prevé que el Brent suba desde los niveles actuales de alrededor de 75 dólares por barril a un promedio de 89.40 dólares por barril este año. El escenario de mayor crecimiento del PIB en China añadiría hasta 5 dólares por barril.
Según WoodMac, los márgenes mundiales de refinado descenderán a unos 6 dólares por barril en el cuarto trimestre, frente a los 11 dólares del año previo, ya que la ampliación de la capacidad mundial supera el crecimiento de la demanda de combustibles para el transporte.
Según el informe, el escenario de mayor crecimiento del PIB reduciría las exportaciones chinas de gasolina y gasóleo a medida que aumente el consumo interno, apoyando los márgenes mundiales de refinado en otros 50 centavos por barril en el cuarto trimestre.