La primer instrucción, tras conocerse el caso de los jóvenes asesinados en Nuevo Laredo, Tamaulipas, “fue que se investigue”, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien destacó que quienes llevaron a cabo la investigación de los hechos fueron los mismos oficiales del Ejército mexicano.
En el Salón Tesorería de Palacio Nacional subrayó que fueron los propios mandos de las Fuerzas Armadas “quienes fincaron responsabilidades a los militares, fueron los mandos del Ejército, y eso no se hacía antes. Surgió de ellos”.
En conferencia matutina indicó que la investigación del caso la tiene la Fiscalía General de la República, “y ya se está castigando, ya están sancionados (los responsables)”, subrayó, tras insistir que no se fortalece a las Fuerzas Armadas “ocultando las cosas”.
Insistió que en su gobierno “no permitimos tortura, que se ejecute a nadie, que se remate en enfrentamientos a heridos. No permitimos masacres ni violaciones de derechos humanos, tan es así, que me llama la atencion que estén convocando para el domingo a una supuesta manifestación de apoyo al Ejército, para defender al Ejército (por el caso de Nuevo Laredo)”.