Ciudad de México. A raíz de que las nuevas reglas de mejor ejecución han perjudicado al inversionista, el sector de casas de bolsa en México, compuesto por 36 intermediarios, ha solicitado a la autoridad financiera llevar a cabo una revisión de las mismas.
El deber de mejor ejecución se refiere a la obligación que tienen las casas de bolsa de obtener el mejor resultado posible para sus clientes, según las condiciones de mercado, en la ejecución de las órdenes de valores de renta variable (acciones) negociados en las bolsas de valores.
María Ariza, directora general de la Bolsa Institucional de Valores (Biva), describe que la mejor ejecución es un ejercicio que busca tener al inversionista final en la mejor posición (mejor precio y disponibilidad de títulos bursátiles).
“La implementación de la mejor ejecución ha sido compleja y ello ha derivado que los resultados siguen sin estar donde uno quiere para todas las partes, tanto para los inversionistas, las Bolsas y las casas de bolsa. Estamos en la búsqueda de que funcione para todos.
“Estamos de nuevo en las mesas con autoridades y participantes, estamos de nuevo negociando, estamos de nuevo viendo qué necesitan los inversionistas, qué necesitan las casas de bolsa, qué necesita el mercado para que crezca. En Biva estamos empáticos y utilizando los recursos para que funcione. Me siento optimista de que esto se va a resolver en beneficio del mercado. Esto de una segunda Bolsa era nuevo e intentamos encontrar un modelo para México y encontramos que hay algunas fallas que siguen sin resolverse”, garantiza Ariza en entrevista.
Y es que la Secretaría de Hacienda subió a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria la propuesta de mejor ejecución, la cual fue modificada por el desacuerdo de las casas de bolsa, finalmente se dió luz verde el año pasado, pero siguieron los problemas.
La regulación del deber de mejor ejecución que ya lleva tiempo (se anunció en el 2018, con el comienzo de operaciones de Biva) e incluso ha tenido modificaciones, ha fragmentado el mercado, considera José-Oriol Bosch, director general de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
Casas de bolsa preocupadas
Pese a que algunas casas de bolsa han manifestado que se sometieron a una importante inversión para cumplir con la regulación de mejor ejecución, el trasfondo es que “todos los intermediarios tienen una preocupación, no de la mayoría, de todos, en donde creen que sí hay un impacto en el cliente final, entonces ahí perdemos todos”, enfatiza Bosch.
Recomienda que hay que retomar el tema de mejor ejecución para que crezca el mercado. “Hoy en día tenemos un pastelito cada vez más pequeño y estamos viendo cómo repartirlo”.
En breve entrevista, Oriol Bosch describe que puede haber muchas analogías de cómo se está perjudicando al inversionista. Por ejemplo, si una persona va al mercado y tiene que comprar un kilo de carne, 800 gramos los compra en un local y 200 gramos en otro, se tiene que ir a dos lugares y se tiene que formar dos veces. Eso pasa en la vida real en Bolsa.
Y es tan rápido que si una casa de bolsa manda una orden para comprar 100 acciones, el algoritmo de orden le dice que tiene que mandar 80 para una Bolsa y otras 20 acciones en la otra. Si hay más mercado donde se manda la orden de 80 acciones se ejecuta inmediatamente, las otras 20 van a un lugar donde no hay mercado, no se ejecuta y se regresa. A la hora de regresar se tiene que volver a formar, lo que se llama prelación, porque había otros antes y entonces te vas al final de la línea. Entre el 80 y el 20 hubo otros compradores que subieron el precio. Lo anterior se da en nanosegundos.
La BMV aseguró que a partir de la regulación de mejor ejecución (con la que se busca crear una competencia pareja entre las Bolsas del país) su participación de mercado bajó a 83 por ciento, en el cuarto trimestre de 2022.
Y es que las casas de bolsa o intermediarias bursátiles deben realizar para que sus clientes reciban los mejores precios posibles en las transacciones que lleven a cabo.