Ciudad de México. La confianza de las empresas en México mejoró en febrero, aunque tres de los cuatro sectores industriales siguieron en zona de contracción (terreno pesimista).
De acuerdo con la opinión de las y los directivos empresariales de los sectores manufacturero, construcción, comercio y de los servicios privados no financieros sobre la situación económica del país y de sus empresas, la confianza empresarial paró su deterioro en el segundo mes del año, pero sólo el manufacturero salió de la zona de contracción.
El Indicador Global de Opinión Empresarial de Confianza (Igoec), que integra el promedio de los cuatro sectores que lo componen, registró un nivel de 48.9 puntos con cifras originales en febrero, por debajo del umbral de 50 puntos que representa un terreno pesimista, lo que representó una caída de 3.6 puntos con relación a febrero de 2022. No obstante, mostró una recuperación de los niveles reportados en enero pasado, cuando se ubicó en 44.3 puntos, y diciembre del año pasado de 45 unidades.
Las condiciones de negocio en México muestran un avance en febrero, pero tasas de interés más elevadas (costo del crédito); aún presiones inflacionarias, el temor de una importante desaceleración económica e incertidumbre para invertir, inhiben un mayor optimismo, sugieren datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El indicador de confianza de la industria manufacturera fue de 52 puntos, 1.8 puntos más que en enero pasado, con cifras desestacionalizadas para hacer más comparables los periodos. Con este dato, el indicador se coloca, por segundo mes consecutivo, por arriba del umbral de los 50 puntos. No obstante, presentó un descenso anual de 0.3 puntos.
Por su parte, el índice de confianza de las siguientes industrias, aunque siguen en zona de terreno pesimista, se van recuperando. El de comercio aumentó 1.5 puntos mensual y disminuyó 6.5 puntos anual; el de la construcción, 4.5 puntos en febrero con respecto al mismo mes de 2022 y un alza de 0.4 frente a enero del presente año; el de servicios privados no financieros cayó 3.6 puntos en el segundo mes del año con respecto a febrero de 2022 y avanzó 7.3 puntos mensual.
Pedidos manufactureros crecieron 1.58 puntos en febrero
El Indicador de Pedidos Manufactureros (IPM), que mide el comportamiento de la economía manufacturera en México, reportó que la actividad industrial rebotó en febrero de 2023, luego de dos contracciones mensuales consecutivas.
La actividad manufacturera mexicana registró en febrero un crecimiento mensual de 1.58 puntos, luego de que en enero no presentó crecimiento y de que en diciembre cayó 0.6 unidades de manera mensual, con datos desestacionalizados. El IPM se ubicó en 53.4 unidades, permaneciendo por arriba del umbral de los 50 puntos, que supone expansión en la industria e hilando 31 meses en dicho umbral y rondó datos de hace 10 años.
En medio del cada vez más nombrado proceso del nearshoring está impactando positivamente las expectativas de crecimiento por una posible expansión de la inversión, la industria manufacturera presentó una importante fortaleza.
Con respecto a febrero de 2022, el Indicador de Pedidos Manufactureros registró un alza de 0.7 puntos, su mejor avance anual desde mayo del año pasado.
A su interior, se observaron importantes crecimientos mensuales con cifras ajustadas por estacionalidad, para hacer más comparables los periodos, en los componentes correspondientes a los inventarios de insumos, que subieron 4.0 puntos en febrero con respecto a enero del presente año. El volumen esperado de producción aumentó 2.8 puntos. En ambos casos se observó una recuperación, luego de las caídas mensuales que reportaron en el primer mes del año.
En tanto, los niveles esperados de personal ocupado total cayeron de 0.2 puntos y la entrega esperada de insumos por parte de los proveedores subieron 0.2 puntos en el periodo de referencia.
Según el sondeo elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en su comparación anual, los inventarios de insumos registraron un alza anual de 5.5 puntos en febrero con respecto al mismo mes de 2022; mientras que el volumen esperado de producción aumentó 1.8 puntos; la entrega esperada de insumos por parte de los proveedores cayó 0.6 puntos, luego del descenso anual de enero de 2.3 unidades.