Ciudad de México. Terminó febrero. Los inversionistas tuvieron que hacerle frente a una avalancha de resultados empresariales, pero con una inflación que se resiste a descender de manera acelerada, por lo que los mercados financieros terminaron el segundo mes del año mixto, pero con el peso mexicano aprovechando la debilidad del dólar.
Pese a la aversión al riesgo por parte de los inversionistas en febrero, el peso mexicano destacó entre los instrumentos financieros más rentables, pues la moneda nacional se apreció 2.73 por ciento en febrero ante la divisa estadounidense, para cerrar en 18.3253 unidades por dólarspot, su mejor nivel desde abril de 2018.
En febrero, el peso mexicano destacó como la divisa más ganadora frente al dólar a nivel mundial, debido a la expectativa de que las tasas de interés (el costo del crédito) se mantendrá elevado por un periodo prolongado, lo que hará que el diferencial de tasas entre México y Estados Unidos (6.25 puntos porcentuales) se vea atractivo para que inversionistas internacionales inviertan en pesos.
Asimismo, los proyectos de nearshoring, inversión extranjera directa, como el anuncio de inversión de Tesla en el país, están completando con la debilidad del dólar, a medida que el peso mexicano se fortalece.
De acuerdo con datos del Banco de México, la moneda mexicano terminó el primer bimestre del año con una ganancia de 6.1 por ciento ante el dólar.
En tanto, Wall Street cerró febrero con pérdidas y el IPC de la Bolsa Mexicana de Valores le secundó.
El Dow perdió 4.2 por ciento en febrero; el S&P descendió 2.5 por ciento y el Nasdaq retrocedió 1.1 por ciento en el conjunto del último mes.
Febrero se consolidó como un período negativo para el apetito de riesgo global, ya que una seguidilla de datos macroeconómicos más dinámicos que lo previsto en Estados Unidos han obligado al mercado a elevar sus expectativas de tasas de la Reserva Federal (Fed), más en línea con lo que han planteado los miembros de la entidad.
Mientras, el Índice de Precios y Cotizaciones cayó 3.31 por ciento en febrero, su peor febrero desde el 2020. Mientras que en el primer bimestre, el mercado accionario mexicano ganó 8.86 por ciento, su mejor rendimiento desde el 2004 para los primeros dos meses de cada año.