Ciudad de México. El baile regresó a la Santa María la Ribera, donde más de un centenar de personas se reunieron para bailar o solo disfrutar con la pareja, la familia y los amigos “los mejores” pasos.
A una semana de la agresión a integrantes del sonidero Sinselejo, quienes intentaron colocar sus bocinas, mismas que les fueron quitadas; así como una “caja con más de 200 discos”, según dijeron asistentes, la música volvió.
Con bocinas traídas de sus casas y el uso de sus datos de celular para “poner la música que nos gusta”, la gente bailó al ritmo de la cumbia, salsa, huaracha o merengue, como Melao, un hombre invidente.
Desde hace 11 años acude al sonidero para “sacar” sus mejores pasos, al igual que Armando y Lupita, quienes invierten cuatro horas para disfrutar de “seis más de sano esparcimiento”.
Con cartulinas donde se lee: “más baile, menos represión”, y la recolección de firmas, vecinos y asistentes solicitaron a las autoridades “nos dejen disfrutar de un momento de daño esparcimiento, donde no hay venta de alcohol o drogas, como acusó la alcaldesa Sandra Cuevas”.
Cabe señalar que, en el lugar no se observan policías.