El despido de casi 6 mil trabajadores del Instituto Nacional Electoral (INE), a consecuencia del Plan B, costará 3 mil 500 millones de pesos, para el pago de finiquitos, dijo el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova.

En un seminario organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, el consejero llamó “mazacote” al Plan B, como se identifica a la reciente reforma electoral y señaló que ésta coloca al INE en una situación no funcional.

Al principio de su exposición dijo que están esperando la publicación de la reforma en el Diario Oficial de la Federación para proceder con la impugnación de lo que considera un cúmulo de violaciones constitucionales.

En principio alista la impugnación del cambio relacionado con la salida de Edmundo Jacobo, Secretario Ejecutivo del INE, al considerar que se trata de “una venganza” de los promotores de la reforma.

Córdova dijo que la Constitución reserva al consejo general del organismo la facultad de nombrar y por ende, remover ese puesto.

Es decir, la única forma de quitarlo, al igual que a los consejeros, es a través de juicio político.

Luego, al nombrar otros cambios derivados de la desaparición de la Junta General Ejecutiva – en los términos actuales- y otros del diseño institucional, expresó que el Plan B es “un bonito mazacote que vuelve infuncional al Instituto y lo pone en riesgo”. Añadió: “tal vez ese era el propósito, pero habría que preguntarle a los legisladores”

Señaló que “la carga mortal” de la reforma es el despido de trabajadores.

El Servicio Profesional Electoral Nacional (SPEN) está integrado por 2 mil 571 trabajadores y acorde con su análisis, la reforma recorta a 2 mil 100, esto es, el 84.6 por ciento, a lo que se debe agregar el despido de personal administrativo.

Con base en lo anterior asegura que el Plan B “esfuma” a casi 6 mil trabajadores (de una plantilla permanente de más de 17 mil trabajadores en el INE.

El gasto por esta liquidación será de 3 mil 500 millones de pesos, por lo que preguntó, en referencia al objetivo de austeridad planteado en la reforma, ¿dónde está el ahorro?

Repitió lo dicho en casi todas las presentaciones que realiza desde hace varias semanas en el sentido de que el Plan B “las elecciones están en riesgo” porque no hay certeza de la operación de casillas o del número que debe haber.

Por tanto, sostuvo, se eleva el riesgo de nulidad de los comicios. “No quiero pensar que ese sea el objetivo de la reforma”, expresó en este seminario titulado “El Plan B electoral: ¿equidad, austeridad o incertidumbre?

Señaló que en su existencia, ocho años, el INE ha organizado 331 elecciones, con cero conflictos post-electorales. Aquí se incluye la reciente elección extraordinaria en Tamaulipas, la cual tuvo una participación ciudadana de algo más de 20 por ciento, factor que Córdova adjudicó a una posible apatía para elegir a un senador.

Organizar elecciones, añadió, no es solo llegar al campo; además, “hay zonas del país en las que el INE es la única agencia del Estado con capacidad para entrar, algunas controladas por el crimen organizado donde ni siquiera las fuerzas de seguridad pueden entrar. Y eso no se construye de la noche a la mañana”.

Argumentó que en las elecciones de 2021, de 161 mil casillas dejaron de instalarse once, a causa de conflictos sociales.