Morelia, Mich. El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, señaló que fueron más de 12 mil millones de pesos de la administración del perredista Silvano Aureoles (octubre 2015-septiembre 2016) que están sin comprobar o no se sabe en qué se destinaron y este lunes la Auditoria Superior de la Federación (ASF) confirmó las denuncias.
Tan sólo Michoacán representa el 53 por ciento de las observaciones de todo el país, enfatizó, tras señalar que una de las irregularidades detectadas en la capital del estado, se encuentra en dos obras importantes que son los distribuidores viales, donde al recibir la administración encontraron que ya se había pagado cerca de un 80 por ciento de los trabajos, mientras el avance real era apenas de un 30 por ciento.
“Hay anomalías severas en varias áreas y estamos investigando, algunas ya las hemos denunciado ante la Unidad de Inteligencia Financiera, ante la FGR”, subrayó Ramírez Bedolla, al ser entrevistado en el informe anual del Tribunal de Justicia Administrativa.
En noviembre de 2021, la Contraloría de Michoacán encontró graves irregularidades en la administración de Aureoles cuando fueron rentados siete inmuebles para igual número de cuarteles regionales para la Policía estatal, que a dos días de concluir la administración —30 de septiembre de 2021— fueron adquiridos por el gobierno de la entidad, sumando en total un gasto de cinco mil 186 millones de pesos, cuando el costo real no era del 15 por ciento, a decir del secretario de Seguridad Pública, José Alfredo Ortega.
Se simularon contratos de arrendamiento que realmente eran contratos de obra pública para evadir la ley de adquisiciones, las licitaciones, las reglamentaciones y la ley en esta materia, señaló en ese momento el gobernador del estado.
En los siete cuarteles ocurrió lo mismo, pero además fueron construidos ineficientemente, todos iguales, utilizando material barato como plástico y lámina metálica. El costo real de los cuarteles fue de poco más de 15 por ciento del total de la erogación total del gobierno estatal.
“Lo más grave, es que en cada una de las siete instalaciones —Lázaro Cárdenas, Coalcomán, Jiquilpan, Zitácuaro, Uruapan, Huetamo y Apatzingán— se construyó una llamada Casa de Gobierno, donde se hospedaba el gobernador cada vez que llegaba a esas regiones, contaba con helipuerto, dos recámaras, sala, baño completo, jardín, estancia, palapas y asador”, subrayó Ramírez Bedolla.
Otra denuncia del secretario de Seguridad Pública del estado, cuando apenas llevaban unas semanas en el gobierno –octubre de 2021- fue la renta de seis helicópteros (cinco Airbus A 125 y un Augusta Koala) y un avión sigiloso Stemme durante seis años por un monto de mil 227 millones 865 mil pesos. En las oficinas de gobierno se aseguraba que las aeronaves eran de Aureoles, y que el propietario era un prestanombres.
En julio de 2022, el gobernador de Michoacán informó que habían perdidos más de dos mil millones de pesos destinados a obra pública, es decir, no se aplicaron, por lo que se habían presentado 12 denuncias en contra de funcionarios de la pasada administración, 10 de ellas de carácter federal.