En relación con el decreto presidencial que prohíbe el consumo humano de maíz transgénico, la Semarnat anunció que seguirá trabajando como autoridad competente en materia de bioseguridad, sentará las bases para contar con la institucionalidad necesaria que permita tomar decisiones y actuará en apego a la ley y con criterios técnico científicos.
En un comunicado, tres días después de que el decreto se publicó en el Diario Oficial, señaló que la disposición es histórica “para México y para el mundo, ya que el maíz es el cultivo más importante del planeta y su futuro depende de preservar la riqueza biocultural de nuestro país, el cual tiene su centro de origen en México y fue aquí donde las culturas milenarias lo domesticaron”.
Precisó que las “decisiones están encaminadas a salvaguardar la salud de las personas, tener un medio ambiente sano y lograr la seguridad y autosuficiencia alimentaria”.
Agregó que el decreto tiene como fin “precisar el objetivo y alcance de las políticas públicas en lo que respecta al glifosato y maíz genéticamente modificado, así como simplificar y clarificar los alcances del Decreto de diciembre de 2020 sobre la materia”.
Explicó que ésta disposición define las acciones que deberán realizar las dependencias en relación con el uso, enajenación, distribución, promoción e importación del glifosato y de agroquímicos que lo contienen como ingrediente activo y de maíz genéticamente modificado para salvaguardar la salud, un medio ambiente sano y la seguridad y autosuficiencia alimentaria.
Agregó que decreto prohíbe el uso de maíz genéticamente modificado para la masa y la tortilla, “lo cual no representa afectación alguna al comercio ni a las importaciones porque México es autosuficiente en la producción de maíz blanco libre de transgénicos, y permite su utilización para alimento del ganado y productos comestibles industrializados, mientras se buscan opciones para sustituirlo, en lo que se seguirán sumando esfuerzos”.
Por otro lado, las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal deberán realizar las acciones conducentes a efecto de llevar a cabo la sustitución gradual del glifosato hasta llegar a su prohibición en marzo de 2024.