Nueva York. Al aproximarse la culminación del juicio del ex secretario de Seguridad Pública de México, el testigo final de la fiscalía, Jesús El Rey Zambada García, declaró sobre pagos multimillonarios que personalmente ayudó a preparar y entregar al acusado a fines del sexenio de Vicente Fox, mientras que Genaro García Luna informó al juez ante la corte que no testificará en su juicio durante un día que incluyó mas detalles sobre las relaciones de políticos, policías y el narco.
El Rey Zambada, hermano de Ismael El Mayo Zambada y desde 2012 testigo cooperante del gobierno de Estados Unidos, repitió su testimonio -aunque algo modificado- que ofreció primero en 2018 en este mismo tribunal ante este mismo juez Brian Cogan durante el juicio de Joaquín El Chapo Guzmán Loera de que entregó dos pagos por un total de 5 millones de dólares al entonces jefe máximo de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) a fines de 2006.
Bajo interrogatorio de la fiscal Saritha Komatireddy durante horas, El Rey Zambada detalló cómo los pagos que él personalmente ayudó a entregar al acusado se realizaron a través del abogado Óscar Paredes, hombre de confianza de su hermano, El Mayo, en el restaurante Champs Elysees que estaba ubicado sobre Paseo de la Reforma, justo al otro lado de la avenida donde se encuentra la embajada de Estados Unidos.
Esos encuentros, informó, empezaron cuando Paredes le comentó a Zambada que había una oportunidad para reunirse con García Luna que “va a ser el secretario de Seguridad Pública” en el próximo sexenio (de Felipe Calderón), y que se debería de tratar la protección del cártel y de su hermano, y que esa oportunidad costaría 3 millones de dólares.
Detalló que fueron a la casa de El Rey, colocaron el dinero en un amplio portafolio y en una maleta para deportistas. Zambada fue primero al restaurante donde se sentó en el bar, poco después llego Paredes con el dinero, subió al segundo piso a un privado, y después llegó García Luna y dos acompañantes que ingresaron al privado. “Lo vi salir con los dos compañeros” y después habló con el abogado quien le contó que García Luna dijo que “no habrá problemas con mi hermano (El Mayo)”, pero que no podría hacer más porque tenía compromisos con los Beltrán Leyva.
Esa misma coreografía se repitió unas tres semanas después en el mismo lugar, pero ahora con una maleta deportiva con 2 millones de dólares, y que hubo la misma promesa de que “no molestaran a mi hermano”.