Ottawa. La selección de futbol femenina de Canadá se declaró en huelga para protestar por la desigualdad y la falta de financiación a menos de seis meses del Mundial, que se disputará en Australia y Nueva Zelanda, y fue apoyada por el equipo nacional masculino.
"Estamos cansadas, cansadas de tener que luchar constantemente por un trato justo y equitativo", anunció la selección canadiense en un comunicado. "Ya es suficiente", tuiteó su capitana, Christine Sinclair.
El equipo masculino también se pronunció en un comunicado en el que "apoyan de todo corazón" a las mujeres.
Preocupadas por los "recortes significativos" en el presupuesto de 2023, las mujeres, que se encuentran en Orlando, Florida, antes de la Copa She Believes, han decidido no entrenar ni jugar ningún partido.
"A menos de seis meses del mayor torneo en la historia del futbol femenino, nuestra preparación para la Copa del Mundo (que se jugará en julio y agosto) y el futuro éxito del programa de la selección nacional femenina se ven comprometidos por la capacidad continua de Canada Soccer de apoyar a sus selecciones nacionales".
La federación canadiense (Canada Soccer) respondió en las redes sociales diciendo que "la equidad salarial para nuestra selección nacional femenina es el centro de... las negociaciones. Canada Soccer no aceptará ningún acuerdo sin ella".
Canada Soccer dijo que esperaba reunirse con los jugadores el domingo. Estas llevan más de un año negociando con la federación, pero dicen que todavía están en el "limbo".
"La forma en que Canada Soccer asigna o usa los fondos no está clara y está llena de secretos", escribieron los jugadores en un comunicado.
La selección de Canadá ocupa el octavo lugar en el ranking femenino de la FIFA y en 2021 ganó el oro en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
