La alcaldesa constitucional de Aldama, Angelina Diaz Méndez, denunció que fue obligada a renunciar al cargo "bajo presión y con amenazas de prenderme fuego en presencia de la asamblea y ser agredida sexualmente".
En un documento dirigido al presidente Andrés Manuel López Obrador y al gobernador Rutilio Escandón Cadenas, agregó que fue obligada a firmar su renuncia durante una asamblea efectuada el 30 de enero "para imponer un concejo municipal".
Señaló que la asamblea fue encabezada por Salvador Jiménez Santiz, autonombrado presidente municipal por usos y costumbres; Gilberto López Lunez, síndico municipal; Mateo de la Cruz Hernández, ex síndico y presidente del comisariado de Bienes Comunales, entre otros.
"Con estas acciones de imponer un concejo municipal se violentan mis derechos como mujer y mi derecho a participar en la vida política del municipio de Aldama, que me eligió democráticamente, por lo que solicito de manera urgente y respetuosa, para no aceptar los acuerdos que se tomaron en dicha asamblea y no reconocer al concejo municipal nombrado porque quiero seguir representando a mi pueblo con el cargo que me confirió cumpliendo cabalmente con mis obligaciones que establecen las leyes", expresó Díaz Méndez, del Partido Verde Ecologista de México.
"Esta nota informativa queda como antecedente por cualquier agresión o amenaza que pueda surgir en contra de mi persona o mi familia por denunciar los abusos y atropellos a los que me han sometido", afirmó.
Por separado el colectivo 50+1 exigió que "a la brevedad se emitan las órdenes de protección de emergencia y preventivas en favor de Angelina Diaz Méndez, en razón del riesgo en que se encuentra y en función de su seguridad e integridad personal".
En un documento dijo que "estas acciones de violencia basadas en elementos de género y que tienen por objeto el ejercicio efectivo de los derechos políticos y electorales de Angelina, constituyen violencia política en razón de género".