La llegada de estadunidenses que se han mudado a la Ciudad de México ha generado un aumento de precios en rentas y restaurantes, reconoció el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien recalcó que es un tema que “ya lo está tratando” la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
En su conferencia de prensa diaria, expuso que “nosotros no podemos cerrar la frontera a quienes quieren venir a trabajar a nuestro país”, y adujo que la llegada de jóvenes estadunidenses para hacer teletrabajo desde la capital del país es también “un reconocimiento de que la Ciudad de México es de las más importantes del mundo, más seguras del mundo y muy bella”.
Agregó que “han optado muchos por venir acá, pero como ellos cobran en dólares, sucede que en restaurantes ya los precios están incrementándose, me refiero a restaurantes de la Ciudad de México, la (colonia) Roma, la Condesa, están subiendo los precios, lo mismo en el caso de departamentos, las rentas”.
Consultado sobre la expansión de este fenómeno a varias ciudades del país, con mudanzas que se dan por medio del uso de aplicaciones dedicadas a la renta de departamentos, dijo que hay extranjeros que buscan vivir en zonas como Oaxaca, Los Cabos, Puerto Vallarta o la Riviera Maya, ante lo cual la Secretaría de Relaciones Exteriores “hará algo”, aunque sin abundar en las posibles medidas para su regulación.
En tanto, ponderó que está bajando la afluencia migratoria de quienes van a Estados Unidos a trabajar “porque hay más oportunidades de trabajo en el país” y en Centroamérica ha funcionado el mecanismo para recibir a migrantes de distintas nacionalidades en Estados Unidos con una alternativa que no existía antes.
“De todas maneras debemos de prepararnos porque vienen las campañas en Estados Unidos, y el tema migratorio, la frontera, va a ser o van a querer que sea un tema de debate entre republicanos y demócratas; vuelve otra vez el muro y todas esas cosas. Entonces, hay que estar nada más pendientes porque se alborotan cuando hay campaña”, señaló.
Consideró que es un tema que no se presenta sólo en Estados Unidos, sino que en cualquier país, en vísperas de las elecciones “comienzan a envolverse en las banderas”, y se vuelven muy patriotas y nacionalistas.