Ciudad de México. El avance de la economía mexicana durante 2022 sorprendió a analistas del sector financiero, quienes aseguraron que es una tasa superior al promedio de las últimas tres décadas y como resultado del buen desempeño del sector manufacturero.

Sin embargo, mostraron cierta inquietud por la desaceleración que tuvo el Producto Interno Bruto (PIB) durante el último trimestre del año pasado, por lo que prevén un 2023 con un panorama retador.

Esta mañana el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dio a conocer que durante 2022, el crecimiento de la economía fue de 3 por ciento, en línea con lo proyectado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

“Desde una perspectiva más amplia, el crecimiento del PIB de todo 2022 fue de 3.0 por ciento frente a los niveles de 2021. Esta tasa es superior al promedio histórico de la economía mexicana, pero aún se inserta en un contexto de recuperación, pues para alcanzar los niveles que se tenían en 2018 se requerirá de un alza de 0.9 por ciento en 2023”, expresaron analistas de Monex.

Analistas de Citibanamex precisaron que los servicios crecieron 2.7 por ciento durante 2022 y la producción industrial se expandió a una tasa de 3.2 por ciento.

“En términos no desestacionalizados, en el cuarto trimestre el crecimiento del PIB fue de 3.5 por ciento anual, por debajo de nuestra estimación y la del consenso”, puntualizaron los analistas de Citibanamex.

Detallaron que la economía mexicana sorprendió al alza del primer al tercer trimestre, como resultado de un desempeño mejor al proyectado de las exportaciones y del consumo privado, que se vio impulsado por una recuperación más rápida del mercado laboral y las remesas.

Por su parte, especialistas de Ve Por Más señalaron que “la actividad hiló cinco avances a tasa trimestral, pero la del 4T22 fue la menor en cinco lecturas, al tiempo que se diluyó el efecto reapertura y se desaceleró la economía estadunidense”.

Panorama desafiante para 2023

Aún con el dato, los expertos consideraron que el panorama para la actividad económica de México es retador debido a la desaceleración que se espera a nivel mundial.

Los analistas de Citibanamex mencionaron que el menor crecimiento de la economía global eventualmente debería afectar la dinámica de crecimiento de México, mientras que el crecimiento de la demanda interna también se vería limitado por una mejoría más lenta de los ingresos de los hogares, altas tasas de interés y bajos niveles de confianza.

“En resumen, proyectamos que el PIB registrará crecimientos modestos en el primer semestre, seguidos de disminuciones moderadas en la segunda mitad del año. Continuamos proyectando un crecimiento del PIB para 2023 de 1.4 por ciento”, indicaron.

Los especialistas de Monex precisaron que será en el primer trimestre de 2023 cuando se perciba la pérdida de dinamismo de manera más nítida “y aunque reconocemos que el sesgo es mixto, con amenazas y oportunidades, conservamos nuestro estimado de 0.6 por ciento para todo el año”.

A su vez, los economistas de Ve por Más apuntaron que se mantiene la expectativa de una “fuerte desaceleración del PIB este año” al agotarse el efecto reapertura y como resultado del debilitamiento esperado en la demanda, por la erosión del poder adquisitivo y el las mayores tasas de interés a nivel local y mundial”.