Ciudad de México. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió medidas cautelares a favor del defensor Ricardo Lagunes y del líder comunal de Aquila, Michoacán, Antonio Díaz, al considerar que se encuentran “en una situación de gravedad y urgencia de riesgo de daño irreparable a sus derechos”, luego de que desaparecieron el 15 de enero pasado.
Pidió al Estado mexicano que redoble los esfuerzos para determinar la situación y el paradero de los activistas, con el fin de proteger sus derechos a la vida e integridad personal, y que informe sobre las acciones realizadas para investigar los hechos y evitar que se repitan.
Recordó que Ricardo y Antonio desaparecieron en la frontera entre Michoacán y Colima, después de que ambos participaron en una asamblea realizada en el auditorio comunal de Aquila y horas después fue hallado abandonado y con señales de violencia el vehículo en el que se desplazaban.
En un comunicado, la CIDH informó que el Estado le reportó que está realizando investigaciones y acciones de búsqueda en el último lugar donde fueron vistos los defensores, así como inspecciones y entrevistas, entre otros.
Además, le notificó que lleva a cabo un trabajo coordinado entre instituciones locales y federales para lograr dar con el paradero o establecer la situación en la que se encuentran las víctimas
Si bien la CIDH valoró las acciones desplegadas por el Estado y la información disponible, señaló que ésta “da cuenta de que no hay datos sustanciales sobre el destino o paradero” de Ricardo y Antonio, por lo que consideró que las personas beneficiarias se encontrarían en riesgo inminente.
Puntualizó que el otorgamiento de la presente medida cautelar y su adopción por el Estado no constituyen un prejuzgamiento a una petición que eventualmente pueda ser interpuesta ante el Sistema Interamericano sobre una posible violación de los derechos protegidos en los instrumentos aplicables.